En su último día de estadía en Sydney, Australia, el papa Benedicto XVI se reunió ayer con cuatro víctimas de abusos sexuales cometidos por clérigos, anunció en un comunicado Federico Lombardi, portavoz del Vaticano. El encuentro tuvo lugar en una capilla de la catedral Saint Mary, durante una misa privada. El encuentro no se había incluido en el programa del Papa durante su viaje a Australia, pero se resolvió luego de las críticas recibidas por no invitar a ninguna víctima el sábado, cuando el jefe de la Iglesia pidió disculpas por los cientos de abusos cometidos por sacerdotes católicos. “Creo que (el pedido de disculpas) tendría que haber sido presentado directamente a la gente que sufrió el abuso”, criticó la vocera de la OSC Broken Rites, Chris McIsaacs.

“Como expresión de su preocupación pastoral actual por aquellos que han sido abusados por miembros del clero, Benedicto XVI celebró misa con un grupo representativo de víctimas”, informó Lombardi. Cada una de las víctimas pudo intercambiar algunas palabras con el Papa. “Escuchó sus historias y les ofreció su consuelo, garantizándoles su compañía espiritual, les prometió que seguirá rezando por ellos, sus familias y todas las víctimas”, dijo el portavoz del Vaticano.

En la ceremonia del sábado, con los obispos australianos, el Papa manifestó su “compasión” hacia las víctimas y su “vergüenza” por los abusos sexuales por parte de clérigos. “Lamento profundamente el dolor y sufrimiento que las víctimas soportaron, y les aseguro que yo, como vuestro pastor, comparto el sufrimiento”, dijo el jefe de la Iglesia.

Durante la misa, Benedicto XVI dijo que “las víctimas deben recibir compasión y atención y los responsables de estos males deben ser llevados ante la Justicia”.