El Ministerio de Salud de Brasil confirmó ayer la primera muerte por gripe A en ese país y, según se informó oficialmente, se trata de un hombre que estuvo una semana en la Argentina. Allí hubo 36 nuevos casos de influenza, lo que llevó la cifra de infectados a 627. En tanto, en el país se confirmaron dos nuevas muertes por el virus: los casos fatales llegan a 28. Si bien desde el Ministerio de Salud nacional no confirmaron ninguna versión acerca de la declaración del estado de emergencia sanitaria, todo indicaba que el día clave del anuncio sería mañana, cuando se reúna el Comité de Crisis.

En tanto, con fuerza similar retumbaron corrillos sobre el supuesto reemplazo de Graciela Ocaña, que estaría decidida a abandonar el mando de la cartera sanitaria en las próximas horas. El elegido, según circuló en los medios de Tucumán, sería el vicegobernador de esa provincia, Juan Manzur. De acuerdo con esas versiones, la presidenta Cristina Fernández se habría comunicado telefónicamente con el gobernador José Alperovich para informarle el ofrecimiento del cargo a Mazur. Voceros de la gobernación anoche desmentían la especie.

En plena definición de los comicios legislativos, el Ministerio de Salud de Santa Fe confirmó dos nuevas muertes en ese territorio, con lo que la cifra nacional subió a 28 casos. Se trata de dos jóvenes adultos, uno de los que padecía una patología respiratoria de base que complicó su situación desde el principio.

El ministro de Salud bonaerense, Claudio Zin, aseguró que la posible declaración de la emergencia sanitaria será el principal tema que analizarán los integrantes del Comité de Crisis creado para tomar decisiones en relación con la enfermedad y que encabeza el jefe de Gabinete nacional, Sergio Massa. Posiblemente mañana sea el día en que el grupo se reúna, por primera vez luego de las elecciones de ayer.

Fuentes gubernamentales aclararon que, en principio, la emergencia se declararía en la Capital y la provincia de Buenos Aires, los dos distritos más afectados por la influenza. Sin embargo, Zin intentó atenuar la alarma que puede llegar a generar en la población la declaración de la emergencia. En declaraciones radiales consideró que el cierre de escuelas y lugares de concentración masiva “no tiene razón de ser” y explicó que “no significa que cerremos todo, sino que es un marco de referencia para poder disponer la compra de insumos por compra directa o disponer movilizar personal” como los médicos jubilados, por ejemplo. En ese sentido, Zin apuntó que “es más fácil trabajar bajo la referencia de una emergencia, porque permite a los funcionarios actuar mucho más rápido”, aunque no dejó de recordarle a la población que “también tiene que asumir que alguna cosa tiene que hacer para protegerse”.

No obstante, el gobierno de San Luis decidió no esperar la reunión del comité y anunció ayer a última hora la suspensión de las clases en la provincia a partir de hoy para “evitar la epidemia” de gripe A H1N1. El ministro de Medio Ambiente puntano, Eduardo Gomina, señaló que el objetivo “no es generar pánico”, sino “decirle a la población que tiene que estar alerta para tratar esta problemática”. La decisión llegó tras confirmarse el quinto contagio en el territorio provincial y la existencia de otros treinta en estudio.

Argentina y Chile son los dos únicos países de América latina en los que se cuentan de a miles los habitantes que contrajeron el virus de la gripe A H1N1. Hasta ayer, junto con Colombia, eran los únicos países con víctimas fatales. El panorama se modificó luego de que el Ministerio de Salud de Brasil confirmara la primera muerte por influenza. En el comunicado oficial, las autoridades sanitarias brasileñas precisaron que la víctima “es una persona adulta originaria del estado de Rio Grande do Sul que había pasado una semana en Argentina”, aunque no revelaron su identidad. En el mismo documento, comunicaron que se registraron 36 nuevos casos de la gripe, lo que elevó el total de afectados en el país tropical a 627.