SOCIEDAD • SUBNOTA
“Señora presidenta, señores ministros, señores senadores, sobre la Biblia han jurado, hagan lo que la Biblia dice. Dios y la Patria lo demandarán”, rezaba al anochecer una de las tantas banderas que acompañaron la marcha convocada bajo la consigna “Por un matrimonio con papá y mamá”. El evento reunió entre 1000 y 2000 personas frente a un escenario montado ante las puertas del Congreso, en la primera cuadra de la avenida Entre Ríos.
“No destruyamos el diseño que Dios creó. La familia”, y “Que la descriminación (sic) no sea ahora la familia”, eran algunos de los argumentos que sostenían las pancartas, en concordancia con la convocatoria de los organizadores: la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera) y la Federación Confraternidad Evangélica Pentecostal (Fecep). Ambas se habían manifestado fervorosamente en contra ya durante los debates previos a la media sanción en Diputados, porque, decían, “el proyecto de matrimonio homosexual avanzó peligrosamente”. Los responsables de aquellas manifestaciones habían sido, como ayer, el pastor Rubén Salomone (titular de la segunda) y el pastor Rubén Proietti (quien preside la primera, y gestó la presentación del pastor mediático Luis Palau en el Obelisco en 2008, con el apoyo del macrista Santiago de Estrada). En sintonía con la diputada Cynthia Hotton, Salomone y Proietti pidieron una consulta popular vinculante sobre la modificación del Código Civil.
La Federación Argentina de Iglesias Evangélicas, “fundada hace más de 70 años” y que nuclea a 23 entidades, por su parte, señaló en un comunicado su diferencia radical con la convocatoria: “Invitamos a los y las creyentes (...) a construir una sociedad más justa, inclusiva y con oportunidades”.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux