Los dueños del restaurante Kansas, competencia directa del complejo gastronómico Dallas, propiedad de los hermanos Horacio y Hugo Conzi, entregaron a la Justicia un video registrado por sus cámaras de seguridad en el que supuestamente se puede ver una camioneta Gran Cherokee, similar a la del prófugo, siguiendo a un auto que se parece al remise Ford Galaxy en el que iba el joven Marcos Eschenone, asesinado a balazos el 16 de enero pasado. Al mismo tiempo, los fiscales Mario Kohan y Hernán Collantes recibieron el testimonio de tres personas que con su relato confirmarían que la Gran Cherokee tenía un raspón en su lado derecho, confirmando el testimonio de las dos chicas que acusaron a Horacio Conzi de ser autor de los disparos que mataron a Eschenone.
Los tres testigos, cuyos nombres se mantienen en reserva, vieron a la camioneta a las 8.30 del día del crimen estacionada en un taller mecánico ubicado en la zona de Olivos. “Dicen que tenía una abolladura en el lado derecho”, coincidiendo con la versión sobre el choque que habría tenido con el remise durante la persecución. Un peritaje ya demostró que la Cherokee fue reparada, aunque Hugo Conzi declaró todo lo contrario.
En cuanto al video grabado por los propietarios de Kansas, ya se encuentra también en poder de los fiscales, que todavía no pudieron verlo. “Fue grabado por el sistema Pal-M y el lunes lo van a ver para comprobar si hay similitud entre los vehículos que aparecen en la cinta y los dos autos involucrados en la investigación.”
Esta sería la cuarta prueba contundente que incrimina a Conzi en el homicidio. Ya está comprobado que algunas de las balas salieron de una 9 milímetros propiedad de Horacio Conzi, que la Cherokee fue reparada y que el prófugo se retiró de Dallas en el horario que corresponde con el relato de los testigos de la persecución. La situación de Conzi es cada vez más comprometida y también lo es la de los amigos que declararon que estuvo con uno de ellos a la hora en que ocurrió el crimen. Ellos podrían ser procesados por falso testimonio, según confió a este diario una fuente cercana a la investigación.