El cabo primero Miguel Angel Rodríguez tiene 40 años y vivía con su familia en Burzaco, adonde lo fueron a buscar en un patrullero luego de que se presentara la denuncia en su contra por violación. Con la única compañía de otro cabo y libre de esposas, el imputado pidió parar “para ir al baño”. Su compañero de la seccional 2ª de San Vicente accedió al pedido y detuvo la marcha en una estación de servicio de la firma Sol, que está justo en el cruce de la ruta 210 con la calle Dabel. Rodríguez, que llevaba consigo su arma reglamentaria, desenfundó cuando quedó a solas en el baño y se disparó un tiro a la altura de la pera.
“El proyectil salió por las fosas nasales y se llevó algunos cuantos dientes”, fue el informe verbal que recibieron los padres de Noelia, confirmado luego a este diario por voceros del Ministerio de Seguridad bonaerense. El policía se está recuperando en una clínica privada y “ya no existe riesgo de que pierda la vida”. Las ropas íntimas que llevaba la joven en el momento de la violación fueron enviadas a La Plata para ser sometidas a pericias, y Rodríguez, además de la acusación judicial, enfrenta un sumario interno.