Victoria Morales Gorleri (PRO) es docente y como titular de la Comisión de Educación de la Legislatura fue la vocera del proyecto macrista sobre las juntas de clasificación.

–¿Por qué sostiene que es necesario cambiar el Estatuto del Docente para mejorar el sistema de designaciones?

–El eje del conflicto es la clasificación de los docentes, lo que define qué docentes están frente a las aulas por su orden de mérito. Hoy ese proceso lo realizan los sindicatos docentes a través de las juntas. Creo que esa es una potestad del Poder Ejecutivo, que es quien debe velar por la calidad educativa.

–¿No confía en que los docentes puedan hacer bien esa clasificación?

–Puede haber favoritismo hacia alguien que pertenezca a determinado sindicato.

–Pero el Estado también tiene participación en las juntas y además, con su proyecto, el favoritismo lo puede ejercer el ministerio.

–Para eso se crea una junta revisora integrada por docentes donde se pueden apelar este tipo de circunstancias.

–Si ustedes proponen informatizar el sistema, crear un legajo único por docente e instrumentar la inscripción por Internet, ¿por qué no hacer esto primero y luego modificar las juntas?

–Porque no estamos de acuerdo con el sistema. La Ciudad de Buenos Aires es el único distrito del país donde las juntas tienen esta composición. Y según la Unesco, la Argentina es el único país entre 50 que tiene mayoría docente en la clasificación.

–Si su proyecto no reúne los votos necesarios, ¿apoyaría el de Abrevaya o el de Kravetz?

–El de Abrevaya, porque aunque mantiene algunas juntas, sigue dejando en el Ejecutivo la potestad de hacer la clasificación.

–Con este proyecto, ¿quieren recortar el poder de los gremios docentes, que son los únicos a los que no pudo disciplinar Macri?

–No es así. La gestión del ministro Bullrich ha tenido importantes gestos con los gremios, como la incorporación a planta de los contratados...

–¿Y por qué no los consultaron antes de presentar el proyecto?

–Hay decisiones de gobierno que no necesitan ser consultadas. De todas maneras, se convocó al diálogo a todos los gremios y con algunos hubo acuerdos. No todos tienen la posición de UTE y Ademys.