Este año, entre enero y el último día de octubre, en Argentina hubo 233 femicidios. Más de la mitad de esos crímenes, 142, fueron cometidos por las parejas y ex parejas de las víctimas. En 113 casos, las mujeres fueron asesinadas en sus propios hogares; 252 personas, entre quienes se encuentran 163 menores de edad, quedaron sin madre. Esos son algunos de los datos que el Observatorio de Femicidios Marisel Zambrano, de La Casa del Encuentro, dio a conocer como avance del relevamiento correspondiente a este año.

La mayoría de los asesinos, 57 de los casos registrados, recurrió a armas de fuego; 41 mujeres fueron apuñaladas; 39, muertas a golpes; 19, incineradas. Del total de víctimas, 15 habían denunciado previamente al violento, 13 habían logrado orden de restricción de acercamiento para protegerse del violento y 10 estaban embarazadas. Además, entre las asesinadas se cuentan cinco mujeres trans y una descendiente de pueblos originarios. El relevamiento destaca, además, que 10 de los victimarios pertenecían a fuerzas de seguridad.

Los femicidios registrados dejaron, también, víctimas colaterales, lo que se conoce como “femicidios vinculados”. En lo que va del año, 36 hombres y niños fueron asesinados por tener algún tipo de relación con las mujeres victimizadas sólo por ser mujeres.