La historia de El Molino comenzó en 1850 cuando Constantino Rossi y Cayetano Brenna, dos reposteros italianos, se instalaron en Rodríguez Peña y Rivadavia. Bautizaron su negocio como Antigua Confitería El Molino porque cerca de allí funcionaba el primer molino harinero porteño. La construcción del edificio de Rivadavia y Callao se realizó entre 1914 y 1917. Desde entonces tiene en su cúpula la réplica de las aspas de un molino, que identifican la construcción.
Alfredo Palacios, Carlos Gardel, Lisandro de la Torre, Leopoldo Lugones y Eva Perón fueron algunas de las personalidades que solían frecuentar el lugar. Cerca de su final, la confitería fue sede del nacimiento del frente que llegó al poder en 1999 y se derrumbó dos años más tarde.
Para entonces, El Molino ya estaba cerrado: el 23 de febrero de 1997 bajó la persiana, azotada por juicios y una severa crisis económica.