SOCIEDAD • SUBNOTA
› Por C. R.
Uno de los estudiantes del CUD es Maximiliano, condenado a cadena perpetua siendo menor de edad, acusado de un crimen que afirma no haber cometido. “Primero fue preso mi papá, que fue ladrón toda su vida, y después me agarraron a mí. Fue mi madre la que me llevó a una pizzería de San Miguel, supuestamente para aclarar todo y demostrar que yo era inocente”, recuerda. El crimen ocurrió en junio de 2001. “Yo de chico robé, pero nunca maté a nadie. Quedé muy dolido porque fue mi madre la que me llevó. Con ella nos vemos cada tres meses.”
Maximiliano dice que la prisión le hizo perder “toda mi juventud”. Está golpeado porque “con la cárcel la familia se desintegra, se rompe el vínculo. Yo me separé de mi señora y no lo puedo superar”. Ezequiel tiene 27 años y lleva dos años y un mes en prisión. Dice que cayó en una trampa. “Yo vivía cerca de la comisaría 10° de Lanús y una vez me detuvieron por averiguación de antecedentes. Eso ocurrió en enero de 2004 y allí me tomaron fotografías, aunque no correspondía que lo hicieran.” Según él, el 29 de julio de ese año “sin ninguna razón me acusaron de haber participado en dos secuestros express. Me acusó una fiscalía de Lomas de Zamora que tenía un álbum de fotos con mi foto. Me acusaron de los dos delitos por reconocimiento fotográfico”. Ezequiel, que estudia derecho en el CUD, espera del juicio oral.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux