El fútbol es el deporte preferido para más de la mitad de los argentinos. La afirmación puede parecer obvia, pero por primera vez está apoyada en datos estadísticos: el 56,3 por ciento de la gente lo adoptó como la actividad deportiva que consume, sea a través de los medios o en forma presencial. ¿Cuál es el que lo sigue en interés? El tenis, con el 13,2 por ciento, se adueñó del segundo lugar, probablemente por el prestigio ganado por la Legión, el grupo de argentinos que ocupa puestos destacados en el ranking mundial. La sorpresa entre las preferencias de la gente la dio el vóley (11,7 por ciento) un fenómeno en crecimiento, especialmente en ciudades del interior, desplazando al cuarto lugar al básquet (8,5 por ciento), que hace una década atrapaba a millones de argentinos de la mano de las figuras de la NBA.

Los resultados fueron obtenidos en uno de los tramos de la encuesta de consumos culturales realizada a pedido de la Secretaría de Medios de Comunicación, que también incluyó la práctica de deportes, donde no ganó el fútbol: es que la actividad preferida por los argentinos es “caminar y correr”, algo que no requiere demasiada aptitud técnica, por lo que podría considerarse el deporte más democrático.

“Es un fenómeno que aparece en todo el país y en todas las edades, pero principalmente entre los mayores: lo practica el 29 por ciento de los chicos de 12 a 17 años y, en el otro extremo, el 62 por ciento de los que tienen más de 50”, dice el sociólogo Alberto Quevedo, uno de los responsables del estudio. Con el fútbol la proporción se invierte: lo practica e 46 por ciento en la franja más joven y sólo el 10 por ciento de la mayor.

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Para Quevedo, la práctica de deportes experimentó “un cambio de paradigma en los últimos diez años: no está asociada a la diversión, a lo lúdico sino a un modelo de vida sana. Así, la actividad deportiva se vive casi como un mandato social, que los padres inculcan a sus hijos cuando antes promovían más la lectura. Hay un mandato de salud que incluso está promovido por el discurso médico”.

En cuanto al consumo de deportes, el fútbol ocupa el lugar central, sostenido especialmente por los hombres: es seguido por 8 de cada 10 varones. Esto no quiere decir que a las mujeres no les interese: aunque en menor medida, también es su deporte preferido, aunque sólo lo siguen 3 de cada 10.

Es llamativo el interés femenino por el voley: el 17,8 por ciento de las mujeres lo cuenta entre sus preferidos, mientras que lo elige sólo el 5,3 por ciento de los hombres. “La popularidad que está ganando el voley tiene que ver con el resurgimiento de ese deporte en ciudades medianas del interior, como es el caso de Bolívar, donde juega el equipo de Marcelo Tinelli, o en Monteros (Tucumán) donde una empresa de medicina prepaga sponsorea al equipo”, analiza Quevedo.

El consumo de fútbol está prácticamente monopolizado por la televisión: el 85,3 por ciento de la gente lo sigue por ese medio, mientras que el 6,3 por ciento todavía palpita los partidos por la radio. Lo llamativo es que casi uno de cada diez (el 9,2 por ciento) le dijo al encuestador que asiste a los estadios a presenciar partidos de fútbol. Si bien la encuesta no refleja la frecuencia con la que el simpatizante va a la cancha, “lo que muestra es la disposición a hacer esa actividad”, explican los encuestadores.

En cuanto a los torneos que el público sigue a través de los medios, el 76 por ciento de la gente prefiere los campeonatos nacionales, mientras que el 18 por ciento alterna entre los locales y los internacionales y solo el 2,8 tiene los ojos puestos exclusivamente en las ligas extranjeras. De ellas, la preferida es la española (13,8 por ciento) por sobre la italiana (11,3), la inglesa (8,9), la brasileña (4,4) y la mexicana (3,6 por ciento).

En el plano local, llama la atención la cantidad de gente que se interesa por los torneos de Ascenso: el 31 por ciento de los que siguen algún torneo sigue a los clubes que pelean por subir de categoría. Eso no quita que nueve de cada diez aficionados se mantengan fieles a los partidos de los que pelean por el premio mayor, el campeonato de Primera División.

En la tabla de posiciones de los deportes preferidos, después del fútbol, el tenis, el voley y el básquet, quedan en un segundo plano el rugby, con un 6,2 por ciento de las preferencias. Luego viene la natación, con el 2,6 por ciento; el boxeo, el hockey y el handball, con el 1,7 por ciento cada uno, mientras que los interesados en el automovilismo son apenas el 1,6.

Por supuesto, están los que no muestran interés por ningún deporte, que representan el 15 por ciento de la población consultada. Son los que los lunes no tienen demasiados temas para compartir en una mesa de café.