Dom 31.12.2006
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INVESTIGACION > LA INVASIóN DEL TURISMO DEL EXTERIOR

Extranjeros

Este año visitaron el país 4,2 millones de personas, dejando un ingreso de 3100 millones de dólares. El turismo se convirtió en el cuarto sector que más divisas genera y en la actualidad trabajan 56.500 personas en él, un 13 por ciento más que el año pasado. Salvo la construcción, ningún otro rubro de la economía ha creado puestos a ese ritmo. Para los extranjeros, la Argentina ofrece distintas atracciones, por precios y calidad

› Por Claudio Zlotnik

El jeque árabe junto a tres acompañantes no pasaron desapercibidos para sus ocasionales vecinos de los palcos del Campo Argentino de Polo. Los visitantes habían llegado a Buenos Aires especialmente para asistir a la final entre La Adolfina y La Aguada, disputada el pasado sábado 9. Como el jeque y su séquito, miles de turistas extranjeros se sienten tentados por la Argentina. Hay visitas VIP que arribarán a bordo de los 500 cruceros que ya se anunciaron para los próximos meses, y que amarrarán en distintos puertos del país. A ellos se les sumarán unos 14 mil estadounidenses que practican pesca deportiva y unos cientos de fanáticos de la caza, que suelen instalarse en Córdoba, San Luis o Santa Fe. El fenómeno del turismo extranjero incluye a todos los estratos. Los albergues para la juventud están completos. No alcanzan las 5000 camas que tienen a disposición a pesar de que la oferta se amplía constantemente. El boom del turismo extranjero dejó este año un ingreso de 3100 millones de dólares, de acuerdo con las estimaciones de la Secretaría de Turismo. En total visitaron el país 4,2 millones de personas y se aguarda que en 2007 se supere ese record.

Para los extranjeros la Argentina ofrece distintas atracciones. En primer lugar, los precios accesibles por bienes y servicios con un standard de calidad satisfactoria para ese tipo de consumidor. El tipo de cambio alto es clave para la ecuación económica, mientras que la permanencia en el país de cadenas hoteleras internacionales sirve para complacer la exigencia de calidad. Fuera de lo económico, la diversidad de geografías y la virtud de algunos productos muy valorados por los turistas que llegan al país, como los de marroquinería y calzados, por ejemplo, también explican el boom. El círculo se completa con la multiplicidad de ofertas de espectáculos, como el caso del polo, la visita a un partido de River o de Boca, o los shows de tango.

Con los 3100 millones de dólares que dejaron este año, el turismo se convirtió en el cuarto sector que más divisas genera. Por delante están las oleaginosas (9318 millones de dólares), la industria petrolera (7634 millones) y la automotriz (3447 millones). Detrás quedaron las exportaciones de carnes, los cereales y la industria siderúrgica.

En la actualidad, la Argentina es destino de los turistas cinco estrellas y también de los denominados “gasoleros”, capaces de abonar 25 pesos la noche en una habitación compartida con otros “colegas” en un albergue para la juventud (youth hostels).

El gasto promedio de los turistas está bastante más alto que aquel monto: ronda los 85 dólares diarios (263 pesos). La mitad de los visitantes se hospedan en hoteles de cuatro y cinco estrellas. En este segmento, de acuerdo con las cifras oficiales, la erogación promedio asciende a 187 dólares diarios (580 pesos). Cabe destacar que durante las fiestas de fin de año, estos montos suelen elevarse. De hecho, las cadenas de hoteles de lujo cobraron entre 220 y 550 dólares la noche en una habitación doble a los turistas que quisieron pasar la Nochebuena y el Fin de Año en Buenos Aires.

La Asociación de Hoteles de Turismo, que básicamente agrupa a las cadenas de cuatro y cinco estrellas, como Melia, NH, Sheraton, entre otras, ofrece 34.900 plazas de máximo nivel. Algo más de la mitad –exactamente 19.000 camas– se encuentran en la ciudad de Buenos Aires. La oferta hotelera viene expandiéndose rápidamente para tratar de satisfacer la demanda, que está al límite durante las temporadas altas. Este año se concretaron inversiones por 424 millones de pesos, que sirvieron para terminar la construcción de 78 establecimientos en distintos puntos del país –en la Capital, Jujuy, Mendoza, Puerto Madryn– y el primer cinco estrellas que tiene la provincia de Santa Fe: el Rostower, de la ciudad de Rosario.

Para 2007 ya hay inversiones previstas: en el Gobierno prevén que se inaugurarán 250 hoteles, lo que demandarán inversiones por 1900 millones de pesos en ese año. Las oferta de camas se expandirá un 3 por ciento. Entre las cadenas que cortarán cintas se encuentran: Hilton

(Ushuaia e Iguazú) y Sheraton (Mendoza).

A las plazas de lujo se suman las 500 mil camas de los 7000 hoteles de la Federación Empresaria Hotelera (Feghra). De este total, los turistas extranjeros recurren preferentemente a los 850 establecimientos de tres estrellas. Según los empresarios, este tipo de hoteles es elegido por el 12 por ciento de los que visitan a la Argentina. Otro 8 por ciento va a los de categoría 1 y 2 estrellas. Un 12 por ciento alquila su propio departamento o recurre a los albergues para la juventud. Un 20 por ciento comparte vivienda con su amigo o familia argentina y un 48 por ciento elige los hoteles de lujo.

¿A qué vienen?

Seis de cada diez extranjeros dicen que eligen la Argentina como un buen destino para el ocio en la época de vacaciones. El resto se divide entre quienes vienen a hacer negocios o a visitar amigos. El dólar alto es una invitación muy atractiva. Más todavía si hay una oferta de bienes de calidad para elegir. No es casual que los extranjeros mantengan en el primer puesto del ranking de preferencias a los productos de marroquinería y a la indumentaria, tanto de hombre como de mujer. El calzado, las artesanías y la ropa deportiva completan la nómina. Esa predilección está en línea con la variedad de comercios en las principales arterias convocantes para el turismo, como la calle Florida o la avenida Alvear, o en los shopping, verdaderos polos de atracción de los visitantes.

Otros viajeros arriban con gustos o hobbies más sofisticados. Por ejemplo, los 14.000 estadounidenses que en el último año llegaron a varias zonas de la Patagonia para practicar la pesca deportiva. Los destinos preferidos son Bariloche, Esquel, San Martín de los Andes y Tierra del Fuego, que tienen la particularidad de contar con las especies más buscadas por esos turistas. En especial las truchas, que son de mayor tamaño que las encontradas en Estados Unidos. Justamente, se trata de peces que fueron traídos desde ese país y desde Europa hace un siglo y fueron sembrados en la Patagonia. Los pescadores, de acuerdo con estimaciones de Jaime Ríos, coordinador de pesca de la Secretaría de Turismo, gastan un promedio de 2000 dólares diarios y permanecen un promedio de cuatro días. A estas jornadas suelen añadírseles un circuito por la Capital, que incluye espectáculos.

Hay pescadores que llegan desde Brasil. A diferencia de los estadounidenses, prefieren las provincias de Corrientes y Entre Ríos. Se calcula que los brasileños dejan alrededor de 5 millones de dólares anuales. Otro gran negocio turístico que se está expandiendo a un ritmo interesante está relacionado con la caza deportiva (ver aparte).

¿Quienes vienen?

De acuerdo con los últimos datos oficiales, los brasileños les arrebataron el primer lugar del ranking a los europeos. Durante el tercer trimestre llegaron 109.053 brasileños contra 103.340 de europeos. Un año atrás ganaban los del Viejo Continente por 101.137 a 88.651. El incremento de visitantes brasileños fue del 23,2 por ciento. Durante enero y setiembre, el saldo de ingresos y salidas de turistas fue positivo en 639.391 personas, un 39 por ciento más que en el mismo período de 2005. En promedio, cada turista se queda en la Argentina 13 días.

De los países latinoamericanos (exceptuando a los vecinos) arribaron 81.290 entre julio y setiembre (aumento de 4 por ciento); desde Chile lo hicieron 72.582 (caída de 3,1 por ciento); y desde Estados Unidos y Canadá llegaron 66.957 (más 3,9).

Historia aparte es lo que sucede con los visitantes desde China. Ya hay agencias que se especializan en turistas chinos. Hablan su idioma y conocen a la perfección sus costumbres. Si bien hasta el momento China no figura entre los principales orígenes de turistas, los empresarios tienen en cuenta que los habitantes de ese país destina cada vez más recursos a recorrer el mundo. Se estima que este año hubo 25 millones de ciudadanos chinos viajando a lo largo y ancho del planeta.

Sean brasileños, estadounidenses, europeos o chinos, el turismo receptivo se convirtió en uno de los principales negocios de la Argentina post convertibilidad. Y genera mucho empleo. En la actualidad trabajan 56.500 personas en el sector, un 13 por ciento más que el año pasado. Salvo la construcción, ningún otro sector de la economía ha creado puestos a ese ritmo.

Cómo llegan al pais
medio de transporte cantidad de turistas extranjeros en %
Vía aérea 2.068.396 53,1
Vía fluvial y marítima 317.822 8,2
Vía terrestre 1.508.876 38,7
Total 3.895.094 100,0

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