FINANZAS > DEBATE SOBRE EL TIPO DE CAMBIO DE EQUILIBRIO. PRESIONES DE INDUSTRIALES Y FINANCISTAS
La discusión sobre la paridad cambiaria se ha intensificado en los últimos meses a partir del reclamo de grandes industrias de una mayor devaluación, deseo compartido por economistas de la city.
› Por Cristian Carrillo
El nivel del tipo de cambio volvió a formar parte del debate económico. Los popes industriales insisten en que la paridad se encuentra por debajo de su equilibrio y que la autoridad monetaria debería ajustarla. El Fondo Monetario consideró que las monedas de América latina están subvaluadas, mientras que algunos economistas del establishment financiero prevén un escenario de coordinación entre los principales socios comerciales de la región. Sin embargo, al margen de opiniones de empresarios, políticos y organismos multilaterales, el estudio sobre la evolución del tipo de cambio revela que el dólar no está atrasado.
Ante cada centavo de suba de la divisa aparecen nuevas especulaciones acerca del sendero sobre el que transitará el billete. Cada uno de los interesados tensa la cuerda y todos utilizan, como si les diera mayor entidad a sus palabras, la noción de tipo de cambio histórico o de equilibrio. Más allá de esos pedidos oportunistas, el tipo de cambio real de equilibrio (TCRE), de acuerdo con distintos modelos, está lejos de la simplificación que ejercen economistas del establishment. Esa variable relaciona el precio de los bienes y servicios de una economía con respecto al de un grupo de países con los cuales se realizan transacciones comerciales. Esta cuestión es relevante en las discusiones de política económica por su vinculación con la demanda interna, la estructura de producción, el patrón de comercio internacional, el flujo de capitales y la competitividad de la economía.
A partir del segundo semestre de 2002 se presentó un escenario de tipo de cambio alto con el objetivo de impulsar las exportaciones. Se buscó un desequilibrio que favoreciera a la Argentina mediante el abaratamiento de los productos locales en términos internacionales. Luego de un lustro de mantenimiento de ese esquema, la brecha comenzó a achicarse y los empresarios comenzaron a señalar que “se estaba alejando la paridad de equilibrio”. “El nivel de tipo de cambio real no es informativo en sí mismo de potenciales desequilibrios si no tenemos un adecuado marco de referencia. Es una variable que no es observable de forma directa, por lo que su medición requiere de algún marco teórico de referencia y una apropiada estrategia empírica de estimación”, se explica en el informe de Política Monetaria del Banco Central.
Para la teoría tradicional, la determinación del TCRE se basa en la idea de que el arbitraje debería evitar que dos bienes con las mismas características “tengan un precio distinto entre los países”. El enfoque varía en el tiempo en función de ciertas variables fundamentales. En la Argentina, se incluyen los términos de intercambio, el endeudamiento externo y el gasto público (ambos expresados en porcentaje del PIB) y la productividad relativa respecto de sus socios comerciales. De esta manera, el incremento del precio relativo de las exportaciones contra el de las importaciones genera una apreciación del TCRE.
En esa dinámica, el tipo de cambio observado respecto de su equilibrio mostró una reducción paulatina hasta alcanzar un mínimo de 6 por ciento (es decir, el peso se encuentra todavía devaluado) durante 2008. Pero en el primer trimestre de este año hubo una reversión de la tendencia y el desvío se incrementó a 14 por ciento. “Esto implica que actualmente la moneda doméstica está moderadamente subvaluada respecto de su nivel de equilibrio”, concluye la evaluación del Central.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux