ALIANZA GREMIAL DE PYMES Y TRABAJADORS DE EMPRESAS RECUPERADAS
Camino a un modelo productivo
Nuevos dirigentes empresarios junto a trabajadores se están agrupando al no sentirse representados por las organizaciones tradicionales. Ideas y planes.
Por Raúl Dellatorre
Como un emergente más de la crisis, cuyos efectos negativos atravesaron a distintas capas de la sociedad, representantes de pequeñas y medianas empresas, emprendimientos rurales y trabajadores a cargo de empresas recuperadas se constituyeron en un nuevo nucleamiento, la Coordinadora de Acción Productiva, con el objetivo de “defender el rol protagónico de las pequeñas unidades productivas en la Argentina que viene”. Y consideran que esa defensa sólo se puede dar planteando “cambiar el modelo neoliberal por una propuesta productiva, con filosofía social”.
Su primer pronunciamiento público se conoció apenas conocida la renuncia de Carlos Menem a competir en segunda vuelta. En ese momento consideraron dicha decisión como “un acto de presión del establishment para debilitar al nuevo gobierno e imponer sus condiciones”. Pero no por eso se reconocen como empresarios “kirchneristas”. “Nuestra relación con el Gobierno se da a partir de la discusión de políticas de Estado, en las que tenemos muchas coincidencias con la plataforma política y los objetivos del actual gobierno, pero consideramos necesario abrir un debate nacional”, puntualiza Julio César Urien (h), integrante por el Movimiento del Empresariado Nacional (Moven) de la mesa promotora de la CAP.
Junto a Norberto Oneto (también integrante del Moven) y Guillermo Robledo (Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas), Urien define que “los ejes centrales que planteamos son: un rol activo del Estado en la reactivación económica, fijar la prioridad en el desarrollo del mercado interno, un desarrollo de las economías regionales que vigorice las cadenas de valor e impulse las exportaciones con valor agregado, hacer hincapié en el Mercosur como estrategia comercial y de integración, ya que si se concreta el ALCA nos terminan de arruinar”.
“Somos una burguesía con conciencia nacional, hemos decidido poner todos los esfuerzos en articular este espacio impulsando la formación de la CAP”, apunta Urien. “El Movimiento de Empresas Recuperadas también participa y las contradicciones que podemos tener con ellos, como empresarios y trabajadores, son secundarias. Rechazamos la pelea de pobres contra pobres y como pymes sabemos que el modelo neoliberal nos condena a la exclusión, con un mercado interno destruido, un sistema financiero que nos juega en contra y un Estado que no nos apoyó.” “A diferencia de las cámaras sectoriales, no nos quedamos en las reivindicaciones sectoriales”, concluyó Urien.
Guillermo Robledo, que también participó en la entrevista con Cash, subraya la “necesidad de medidas rápidas para recuperar la producción; las pymes no pueden seguir atrapadas en el sistema de calificación de créditos del Banco Central, que les impide acceder al préstamo bancario”. Advierte, además, que tampoco alcanza con “la implementación de créditos blandos; lo que nosotros impulsamos es la formación de fondos fiduciarios por sector, administrados en forma conjunta por el Estado y los sectores productivos, y un urgente plan de refinanciación de pasivos, recuperación del mercado interno redistribuyendo ingresos, aumentando salarios y bajando impuestos al consumo, y modificar la Ley de Quiebras, para que no sean los trabajadores quienes paguen las consecuencias de cada cierre”. Y en el mismo sentido de la pelea contra el modelo que plantearon los dirigentes pyme, Robledo apuntó a la necesidad de “ser parte de una lucha activa contra el ALCA, obligando al Gobierno a llamar a un referéndum antes de fin de año”.
Con respecto a su participación en un mismo ámbito con sectores empresarios, Robledo manifestó que “es casi natural que estemos juntos, porque trabajadores y pequeños empresarios estamos frente a un sistema que creemos que hay que revertir. Hoy nosotros estamos al frente de empresas recuperadas en algunos casos por procesos de vaciamiento de sus patrones, pero en muchos otros surgieron por el ahogo a las pymes”. Por su parte, Urien buscó diferenciar a este nuevo nucleamiento de la política tradicional de las cámaras empresariales. “No compartimos los reclamos de reivindicaciones dentro del mismo sistema, nosotros vamos por un cambio de modelo, por la reformulación del sistema impositivo, y que de la recaudación extra que se obtenga, el 50 por ciento se destine a obra pública y el 50 restante en favor de actividades productivas; no necesitamos del capital de afuera”, sostiene.
Norberto Oneto, un industrial del sector plástico que participó activamente en la Asociación de Industriales bonaerenses (Adiba), definió que la integración de esta nueva entidad en el sector pyme “no es una actitud oportunista ni un capricho sectorial”. Y alertó que ya se percibe la existencia de “campañas psicológicas tendientes a ridiculizar todo lo que vaya encaminado a la recuperación nacional: siempre es así, es sistemático, este modelo no se va a entregar nunca y van a buscar, hasta el final, deteriorar nuestro trabajo”.