Dadas las declaraciones sobre la paz y tranquilidad que había reinado durante la grabación de 13, el nuevo disco de Black Sabbath (hoy se conocerá el single “God is dead?”), el comunicado que dio a conocer el cantante Ozzy Osbourne en Facebook sorprendió a varios: “Desmiento las versiones que hablan de divorcio con mi esposa Sharon, aunque debo admitir que durante el último año y medio estuve tomando alcohol y drogándome. Estuve en un lugar oscuro, me convertí en una persona horrible para las personas que me aman. Afortunadamente, llevo 44 días sobrio, y trato de ser una mejor persona. Pido perdón por mi comportamiento insano a Sharon, mi familia, mis compañeros de banda y los fans”.