John Lennon es centro de otro juicio: en Nueva York comenzaron ayer las audiencias de la disputa entre Yoko Ono y la empresa World Wide Video, que quiere utilizar en el documental 3 days in the life las ocho horas filmadas por el ex marido de Ono, Anthony Cox, en febrero de 1970. La empresa le pagó un millón de dólares a Cox por el material, pero la viuda de Lennon aduce que los derechos de las imágenes, en las que Lennon habla sobre las drogas e incluso fantasea con ponerle LSD en el té a Richard Nixon, le pertenecen.