El futuro de muchos creadores ya no se escribirá sobre la página en blanco de la intemperie y la invisibilidad. El Ministerio de Cultura de la Nación presentó ayer el Fondo Argentino de Desarrollo Cultural, un programa que distribuirá 15 millones de pesos en incentivos económicos para artistas, productores, gestores, profesionales, empresas, organizaciones no gubernamentales y cooperativas de todo el país. Los postulantes, sean personas físicas o jurídicas, podrán optar entre cuatro líneas de acción –movilidad, sostenibilidad, infraestructura e innovación– y catorce modalidades de apoyo que incluyen la movilidad en el país y en el exterior; el fomento de la comercialización asociativa, de festivales, ferias y mercados culturales; apoyo al posicionamiento de marcas de diseño, a la promoción de catálogos de sellos discográficos, a las colecciones de editoriales independientes y a la edición de catálogos de artistas visuales. También se otorgarán ayudas a la infraestructura de museos y espacios culturales, y a proyectos de base tecnológica y laboratorios de experimentación y creación colectiva. Se estima que estos fondos concursables abarcarán 150 proyectos y aproximadamente 1000 pasajes. “El rol del Estado es mostrar, sostener y potenciar lo que el mercado ignora”, subrayó la ministra Teresa Parodi en la Casa Nacional del Bicentenario, acompañada por Sebastián Schonfeld, secretario de Gestión Cultural; y Verónica Fiorito, jefa de Gabinete.

“La cultura la hacemos todos. El Estado sólo va a los lugares donde ya la estamos desarrollando, ilumina eso y acerca herramientas para facilitar la democratización y la igualdad para todos”, dijo Parodi durante el anuncio de esta iniciativa en sintonía fina con las políticas de inclusión del ministerio. El secretario de Gestión Cultural destacó que este programa garantiza la diversidad cultural. “La batalla por la soberanía arranca y termina en el espacio de la cultura, con lo cual lo que buscamos también es que ese campo de disputa y reivindicación soberana esté fortalecido”, explicó Schonfeld. “El sector cultural participa de un 3,78 por ciento del PBI Nacional. Esto es más que la energía, no es menor. Todo el sector cultural tiene que estar inserto en el universo formal del país y tenemos que ayudar a que se formalice.” La convocatoria para esta primera edición estará abierta hasta el próximo 3 de noviembre. Las postulaciones se realizarán vía plataforma digital en la página del ministerio: www.cultura.gob.ar, donde se podrán descargar los formularios para inscribirse en alguna de las catorce modalidades de apoyo. “No habrá que presentar documentación firmada hasta el momento de la selección –anticipó Schonfeld–. Esto le va a permitir a un montón de gente participar efectivamente porque siempre es una limitación la presentación de documentación.” Cada modalidad tendrá un jurado integrado por expertos que elegirán a las personas físicas o jurídicas que accederán a una ayuda total o parcial.

“La movilidad ha sido siempre una de las grandes problemáticas en todos los proyectos culturales”, reconoció el secretario de Gestión Cultural y anunció que para los viajes al exterior los países de América latina serán prioritarios. “Nuestro aliado es la región, tenemos que apuntar a ese sector para convivir y dialogar, y además es nuestro espacio de pertenencia de la Patria Grande.” Sustentabilidad es la mayor de las líneas en términos de diversidad de modalidades con siete categorías: fomento a proyectos de comercialización asociativa (monto máximo por ayuda de 100 mil pesos); apoyo al posicionamiento estratégico de marcas de diseño (monto máximo 60 mil pesos); fomento a redes, circuitos y colectivos culturales (50 mil pesos); fomento a festivales, ferias y mercados artísticos y culturales (50 mil pesos); ayuda a la promoción de catálogos de sellos discográficos independientes (60 mil pesos); apoyo a colecciones de editoriales independientes (60 mil pesos) y apoyo a la edición de catálogos de artistas visuales (40 mil pesos). “Un buen catálogo bilingüe es una herramienta fundamental para que los artistas visuales puedan mostrarse tanto en la Argentina como el mundo”, argumentó Schonfeld.

El incentivo para infraestructura –con montos máximos de ayuda de 250 mil pesos– se propone impulsar espacios culturales y teatros independientes en todo el país que necesitan del Estado “para hacer reformas, tener más plateas, más escenarios y una oferta de calidad”, ejemplificó el secretario. La línea de innovación –con montos que van de 80 a 150 mil pesos– está dirigida a creadores, artistas y emprendimientos que apelen al uso de las nuevas tecnologías. “No queremos que los músicos vayan a plataformas extranjeras como la marca de la manzanita, pero tenemos que ofrecer ayudas que permitan desarrollar plataformas propias y que los músicos argentinos pueden tener un espacio que cualitativamente los defienda y promueva, más allá de las plataformas internacionales”, planteó Schonfeld y agregó que este Fondo Argentino de Desarrollo Cultural le dará visibilidad a un universo enorme y variopinto de artistas argentinos. ¿Los proyectos y creadores seleccionados accederán a un circuito más comercial? “Los circuitos comerciales son manejados desde otro lugar –aclaró Parodi–. Lo ideal sería que se pueda mostrar en esos espacios lo que el Estado muestra; es decir lo que muestra el mercado y lo que muestra el Estado, que sería la otra parte considerada entre comillas no comercial. Me encantaría mostrar lo comercial que puede ser esa parte, la calidad que puede tener, y cómo incentivaríamos al público para que pueda elegir otras cosas estéticamente bellas que tienen un contenido trascendente que va más allá de lo efectista.” Entusiasmada con el tema, la ministra aseguró que los artistas argentinos “crean y sostienen muchos espacios” que despliegan la riqueza cultural del país. “Más allá de que el mercado lo nombre, lo considere, lo vea, nosotros estamos trabajando en nuestras propias expresiones a lo largo y a lo ancho del país.”

Un ejemplo ilustró la manera en que el Estado debe acompañar actividades que ya están funcionando. Parodi estuvo recientemente en la quebrada de Humahuaca y se reunió con jóvenes músicos. “Ellos nos empiezan a hablar de un festival y esta palabra generalmente nos lleva al formato comercial. ¿Vos querés que te hagamos una programación?, le pregunté a una chica. ‘No, ministra, lo que queremos es el escenario y el sonido porque todos los años los músicos nos juntamos, traemos nuestras canciones y las compartimos. Hacemos un encuentro de músicos para pensar la música’. Me pareció extraordinario lo que esta chica de Humahuaca me pedía. Es esto lo que tiene que hacer el Estado: sostener ese espacio que ellos abrieron.”