El actor estadounidense Viggo Mortensen, quien se encuentra en Buenos Aires promocionando el estreno local de Una historia violenta, la nueva película de David Cronenberg, afirmó ayer en relación con el personaje que interpreta en el film que “todos llevamos adentro la posibilidad de ser violentos” y que “la película critica la hipocresía que nos rodea, pero no únicamente en la sociedad estadounidense, sino en todo el mundo. Porque la violencia es un problema universal, algo que el hombre —civilizado o no— lleva como parte inherente de su ser”, señaló Mortensen, en castellano claro y fluido, en diálogo con la prensa local. El intérprete, que saltó a la fama a raíz de su participación en la versión fílmica del best seller de J. R. R. Tolkien El señor de los anillos, se empeñó en dejar clara su íntima relación con la Argentina, donde vivió muchos años cuando era joven y su pasión por San Lorenzo, del cual es hincha fanático. Los colores azul y rojo de la camiseta del Ciclón estaban presentes en una pulserita que llevaba en su muñeca izquierda, en un pequeño escudo que colgaba de su cuello, en una calcomanía pegada a un termo de metal y en la bombilla del mate que tomaba.