Quien se quedó con el Premio Planeta es uno de los escritores contemporáneos que domina el difícil arte de hacer reír: el español Eduardo Mendoza obtuvo el galardón a la mejor novela inédita, dotado de 601 mil euros, por Riña de gatos. Ambientada en el Madrid previo a la Guerra Civil, es la historia de un joven inglés, especialista en pintura española, que llega al país para tasar un cuadro que se supone de Velázquez. Esta es la 59º edición del Premio Planeta, a la que se presentaron 509 novelas, la mitad procedentes de España y una cuarta parte de América latina. El jurado –integrado por Alberto Blecua, Angeles Caso, Juan Eslava Galán, Pere Gimferrer, Carmen Posadas, Rosa Regàs y Carlos Pujol– seleccionó también como finalista a El tiempo mientras tanto, novela de la periodista y escritora valenciana Carmen Amoraga. Al enterarse de la noticia, el ganador del premio sostuvo: “Siempre escribo libros sin saber bien lo que pasa. Los escribo para saber cómo acaban”. También habló de su Riña de gatos. “Tiene intriga, aventuras y una reflexión sobre un momento histórico. No tiene nada que ver con la guerra, sino con lo que ocurre meses antes, cuando todo el país estaba en plena expectativa”, detalló. “La mayoría de los personajes es de ficción, aunque intervienen personajes reales”, concluyó. Eduardo Mendoza, abogado, publicó su primera novela, La verdad sobre el caso Savolta, en 1975, mientras trabajaba como traductor en las Naciones Unidas, en Nueva York. Su obra cumbre es La ciudad de los prodigios (1986). Otros trabajos: El misterio de la cripta embrujada, Sin noticias de Gurb y La aventura del tocador de señoras. Salvo algunas excepciones, las creaciones de Mendoza se caracterizan por transcurrir en Barcelona y alrededores y por el humor. “No sé escribir sin humor. Para mí no es un ingrediente del plato, sino el plato”, sostuvo a su paso por Buenos Aires, en el marco de la Feria del Libro.