¿La obra de León Tolstoi sigue vigente? Ese interrogante será el eje del ciclo homenaje que comenzará mañana en la Biblioteca Nacional, a un siglo de su muerte y en sintonía con otras actividades que ser realizarán en distintas ciudades del mundo. La muerte sorprendió a Tolstoi el 20 de noviembre de 1910 en la pequeña estación ferroviaria de Astápovo, lejos de su hogar y su familia, a la que había decidido abandonar diez días antes dejando una nota en la que relataba que había decidido acabar su vida en soledad. Por esos días, el escritor enfermó de una grave neumonía y murió en la humilde casa de un guardia ferroviario. Desde entonces, se multiplicaron las hipótesis de biógrafos e historiadores que intentaron hallar las razones que lo llevaron a abandonar todo con apenas un poco de dinero en los bolsillos. Para discutir la obra del autor de Guerra y Paz y Anna Karenina se proyectarán films y habrá mesas redondas integradas por varios representantes de la cultura, de aquí y del extranjero, quienes repasarán la vida y la influencia del escritor en el ámbito del pensamiento, la literatura y la sociedad a lo largo del siglo XX. El ciclo se extenderá hasta el viernes y contará con la presencia de su tataranieto Vladimir Tolstoi, además de visitas como la de la traductora catalana del escritor, Selma Ancira; Tamara Djermanovic; el brasileño Bruno Comide, y el chileno Jaime Galgani, de la Universidad Católica Silva Henríquez. Por el lado de los exponentes nacionales estarán Claudio Ingerflom (estudió en Rusia y se doctoró en Historia) y Gustavo Perednik (graduado de las universidades de Buenos Aires y Jerusalén, que completó en Nueva York sus estudios de doctorado en Filosofía). La semana dedicada al escritor estará respaldada por la Biblioteca Nacional, la Universidad Nacional de San Martín y la Embajada de la Federación de Rusia en la Argentina.