Mientras espera que el jurado del Festival de Cannes decida la suerte de su nueva película, Volver, que competirá en la Sección Oficial de la muestra, el cineasta manchego Pedro Almodóvar ya tiene motivos para celebrar: ayer obtuvo el premio Príncipe de Asturias de las Artes 2006 por su trayectoria cinematográfica. De esta manera, el realizador de 54 años suma un nuevo trofeo a sus vitrinas. Un premio que fue ganado, entre otros, por Paco de Lucía (2004), Woody Allen (2002) y Vittorio Gassman (1997). Almodóvar se impuso en las últimas votaciones al compositor británico Andrew Lloyd Webber, al arquitecto japonés Tadao Ando y a la violinista alemana Anne-Sophie Mutter.

Por otra parte, la distinción cobra mayor dimensión si se tiene en cuenta que, a lo largo de las votaciones efectuadas, fueron descartados candidatos de la talla de Bernardo Bertolucci y Milos Forman, entre un total de 44 aspirantes. El premio de las Artes –al igual que los otros siete que otorga la Fundación Príncipe de Asturias– le será entregado en el mes de octubre. “Ha sido una sorpresa maravillosa, me provoca muchísima ilusión y me siento muy honrado”, dijo el director español en el aeropuerto de Barajas, antes de tomar el avión con el que viajó hacia Cannes. También agradeció a la Fundación Príncipe de Asturias “este pedazo de premio, el de mayor dimensión de los que me han dado”. Lo dedicó “a todas las personas que me han ayudado a hacer dieciséis películas, que son muchísimas” y destacó que “hay cien personas sin cuyo apoyo yo no habría debutado”. Además, resaltó que “compensa mucho todos los vacíos y tapa todos los agujeros, si es que hubiera alguno, con respecto a los premios nacionales”.

En los considerandos del premio, el jurado expresó: “Su obra, enraizada en una sociedad española que se abría a profundos cambios, ha adquirido una dimensión universal a través de un lenguaje original de gran riqueza expresiva, capaz de sintetizar la complejidad humana”. Más allá del reconocimiento, el premio tiene su parte prosaica: 50 mil euros y una escultura de Joan Miró. Según el presidente del jurado, José Lladó, el cine de Almodóvar “representa habitualmente una realidad marginal y suburbana, cargada de dramatismo” que le ha permitido cosechar más de 40 galardones, entre los que se destacan dos Oscar de la Academia de Hollywood: a la Mejor Película Extranjera, por Todo sobre mi madre (2000), y al Mejor Guión Original, por Hable con ella (2003). El premio distingue a la persona, grupo de personas o institución cuya labor en la arquitectura, cinematografía, música, danza, escultura, pintura y demás expresiones artísticas constituya un aporte relevante al patrimonio cultural de la humanidad.

La carrera cinematográfica de Almodóvar comenzó en 1980, con el largometraje Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón, que le permitió dejar su trabajo en Telefónica. Cinco años más tarde fundó con su hermano Agustín la productora El Deseo y, a partir de entonces, produjo sus propias películas y las de otros directores. El éxito llegó con ¿Qué he hecho yo para merecer esto? (1984). Entre otros films que pueblan su universo cinematográfico se encuentran Matador (1985), La ley del deseo (1986), Mujeres al borde de un ataque de nervios (1987), Atame (1989), Tacones lejanos (1990), La flor de mi secreto (1995), Carne trémula (1997) y La mala educación (2004). Además, Almodóvar cuenta con cuatro Premios Goya: a la Mejor Película y al Mejor Guión Original, por Mujeres..., y a la Mejor Película y al Mejor Director, por Todo sobre mi madre. Esta película le permitió la obtención de uno de sus tres premios César. Los otros dos fueron por Tacones lejanos y Hable con ella.