Premio Nobel de Literatura en 1968, Yasunari Kawabata es mejor conocido por los lectores occidentales a partir de sus novelas que por sus cuentos. Pero sus relatos confirman las inquietudes y preocupaciones que hicieron del autor de Lo bello y lo triste uno de los más refinados escritores japoneses del siglo XX. En Un brazo y otros cuentos (Planeta), Kawabata da cuenta de sus obsesiones, desde la tensión permanente entre crueldad y belleza hasta los tópicos delicadamente retorcidos del deseo, pasando por su respeto por las ceremonias. En todos los cuentos se desliza una tenue nostalgia por un Japón que estaba desapareciendo –o ya había desaparecido– frente a sus ojos.