BiblioCi es una red de información especializada en cine y medios audiovisuales como cinematecas, filmotecas, museos y escuelas de cine de América latina, el Caribe y España. Esta red reúne buena parte de las bibliotecas cinematográficas de doce países de Iberoamérica: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, España, México, Perú, Uruguay y Venezuela. Durante el Tercer Seminario de BiblioCiRedes de Bibliotecas Cinematográficas se anunció la creación del Catálogo Colectivo BiblioCi, que fue desarrollado por la Biblioteca de la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica (Enerc), que depende del Incaa. Este instrumento –que funcionará on line– permitirá la consulta de los acervos de los centros de información y documentación cinematográficos de la región.

“Es una base de datos con un buscador al estilo de los normales, pero partiendo de un nivel de especialización y de localización mucho más alto”, comenta el rector de la Enerc, Pablo Rovito, quien destaca que es la primera vez en el mundo que se integra una información de estas características. “Las bibliotecas tienen subidos sus catálogos a la red, pero no son catálogos que integren los de más de veinte bibliotecas de países iberoamericanos como en este caso”, explica. Dentro de seis meses, cuando se termine de migrar toda la información, cualquier persona de cualquier país del mundo podrá ingresar gratuitamente a biblioci.org, encontrar allí el catálogo colectivo y saber en qué biblioteca está la información que está buscando, cómo está catalogada y qué otros organismos tienen información complementaria a la de la búsqueda. El archivo de más de veinte bibliotecas reunirá más de 200 mil títulos. Al catálogo, la Biblioteca de la Enerc le aportará casi seis mil títulos sobre su especialidad, más de 200 títulos de revistas y cerca de 500 guiones originales, además de 500 mil artículos de prensa.

“Es un objetivo de integración regional. Obviamente, nos ayuda el idioma en común, luego está Brasil que también participa con el idioma portugués, pero básicamente es un criterio de integración de la región y de buscar una manera de que toda la región participe de una construcción colectiva”, subraya Rovito. “Me toca formar parte de una coyuntura determinada en la cual los países de Iberoamérica tienen objetivos en común, están yendo hacia una cantidad de logros que se van plasmando; es decir, hay una cantidad de temas que se tornan comunes y que empiezan a integrarse regionalmente. A mí me toca estar acá y dirigir una escuela del Estado y ver con mucha alegría, con mucho placer, que el personal del Estado, al que siempre han pintado como personajes oscuros que vienen por un sueldito, es gente que tiene una energía, una vitalidad, unas ganas de hacer cosas, de que salga mejor, de que esto crezca”, sostiene Rovito. Y agrega que este catálogo fue justamente un emprendimiento del personal de la Biblioteca de la Enerc. “Y es un orgullo que de una escuela pública salga esta iniciativa porque el catálogo, por un lado, requiere pensarlo; por otro, hacer el diseño, y también se necesitan los recursos para poder hacerlo. Y todo eso se hizo desde la Biblioteca con el apoyo del Instituto de Cine que entendió que el proyecto era válido, importante, y por eso lo apoyó y nos permitió desarrollarlo, presupuestarlo, poder diseñar este trabajo, hacerlo, y ‘regalarlo’ a toda Iberoamérica porque es un esfuerzo que hace la Biblioteca de nuestra escuela, pero que está a disposición de todos”, comenta. Rovito también valora la labor del coordinador de la Biblioteca de la Enerc, Adrián Muoyo, y de la analista en sistemas Alejandra Aylagas que desarrolló la parte informática.

Las bibliotecas que integran la red no tienen la misma pertenencia en cuanto a la estructura, pero todas son de cine y de medios audiovisuales importantes para la investigación y el desarrollo de trabajo de escritores, documentalistas y de alumnos y egresados de las escuelas de cine. Desde ahora, sus trabajos de investigación se verán facilitados gracias a esta herramienta on line.