MUESTRA DE HUMOR GRAFICO EN EL CENTRO CULTURAL DE LA COOPERACION
El periódico Acción, que festeja sus primeros cuarenta años, aprovecha para homenajear a los humoristas más notorios que pasaron por sus páginas. Así aparecen trabajos de Fontanarrosa, Rudy, Oski y Viuti, entre otros.
› Por Oscar Ranzani
De todas las formas que puede adoptar el humor, la más ligada al periodismo es aquella que lo convierte en un ojo crítico de la realidad. Con el transcurso del tiempo, el humor gráfico ha ganado su merecido espacio en los diarios, convirtiendo al chiste en un crónica sintética que llega a los lectores de otra manera, pero con el mismo vigor. Desde hace años, el periódico Acción –que se distribuye entre los asociados al Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos– viene convocando a grandes nombres del humor gráfico argentino como Oski, Viuti, Fontanarrosa, Sendra, Daniel Paz, Rudy y Santiago Varela. En el marco del cuadragésimo aniversario de la primera publicación, Paz seleccionó una serie de trabajos para la muestra El humor a los cuarenta, que puede conocerse en la Sala Abraham Vigo del Centro Cultural de la Cooperación (Corrientes 1543) hasta el 1º de octubre, de lunes a sábados de 10 a 22 y los domingos de 17 a 20.30, con entrada gratuita. “El humor –dice el director de Acción, Ulises Gorini– es parte de nuestra visión periodística de la realidad: permite vernos desde una perspectiva crítica y, a la vez, no necesariamente hiriente sino, a veces, con mucha ternura hacia nosotros mismos. Aunque estos humoristas se caracterizan por ser muy mordaces frente al poder en cualquiera de sus formas: político, económico, militar, etc. Consideramos entonces que es un elemento esencial del periódico. Nosotros al ver el trabajo desplegado por estos compañeros concebimos la muestra que está presentada como un homenaje a los humoristas argentinos. No es autocelebratorio de parte de Acción, sino que es celebratorio del humor gráfico en la Argentina.”
“El trabajo de selección fue complicado porque había muchísimo material”, señala Daniel Paz, quien traza un análisis del trabajo de Oski, el primer humorista que colaboró en Acción a través de la tira “Vero Archivo Económico”. “Eran textos –dice Paz– que tomaban aspectos de color de la historia del capitalismo. Incluso de la historia económica anterior al capitalismo, como la época de las colonias. Todo ese material se lo daban a Oski, que lo ilustraba con el estilo especial que tenía, ya que parodiaba las enciclopedias tradicionales. Lo que tomé fue lo que me pareció más atractivo visualmente.”
Durante los gobiernos de Cámpora, Perón e Isabel, Acción no tuvo humor en sus páginas. A partir de 1977, comenzó a dibujar en sus páginas Roberto Fontanarrosa. “En ese momento ya era un humorista gráfico prestigioso que publicaba en Clarín”, comenta Paz, quien destaca que “era una época complicada para hacer humor gráfico, sobre todo con el estilo con que trabaja Fontanarrosa, en el que la actualidad tiene una presencia importante. Empieza con cierta prudencia y, a medida que se va desgastando la dictadura y llega la democracia, la temática del humor de Fontanarrosa es más ácida”. Paz seleccionó chistes con temáticas como la desigualdad social, el endeudamiento externo y la diferencia entre países del norte y del sur, entre otros.
Con la llegada de la democracia, Viuti –autor de Teodoro y Compañía– comenzó a colaborar en Acción realizando un humor atípico: “Hace un humor mudo, muy sutil, muy elegante”, puntualiza Paz, quien seleccionó el material teniendo en cuenta que el trabajo de Viuti estaba vinculado con el período de transición de la dictadura a la democracia. “En los chistes que publica aparecen con mucha sutileza los problemas con los que se enfrenta la democracia, ya que era vulnerable, estaba acosada por el tema del endeudamiento externo y por la amenaza golpista que en ese momento era una cosa cotidiana”, describe Paz.
Desde hace veinte años, Sendra forma parte del staff humorístico de Acción. El autor de “Yo Matías” confiesa que en Acción “el tema de la opinión, del punto de vista del autor, es más importante que esa cosa repentista que puede tener un chiste del momento” y destaca que, en general, aborda humorísticamente “los temas de actualidad nacional como los económicos, sociales y sindicales”, aunque no creó un personaje propio para el periódico porque “el personaje es algo que está normalmente muy ligado a la sensación de cotidianidad que puede dar un diario o eventualmente un semanario. Pero en un quincenario un personaje se hace difícil de sostener. En una semana que te lo perdiste estás treinta días sin leerlo”, explica Sendra. “El criterio con el que seleccioné fue tomar aquellos chistes que aún hoy se puedan disfrutar, aquellos que conservan la potencia que tenían en el momento en que se publicaron. Algo complicado cuando se trata de humor de actualidad, porque el tiempo pasa pero en la muestra hay chistes muy buenos y que valen la pena”, opina Paz.
Otro de los históricos de la muestra es Rudy, cuyas columnas desde el ’93 al ’97 tenían que ver, según su autor, con cierta observación política. “Hablaba del gobierno, hacía una especie de predicciones de lo que iba a suceder al año siguiente”, afirma Rudy, quien luego creó un personaje para la columna de humor, Bonifacito, un chico que tiene entre diez y doce años y que “toma como verdaderas ciertas cosas que uno desde la adultez tomaría como absurdas”, destaca el editor de Sátira/12. Bonifacito tiene un contraste muy fuerte con su padre, ya que mientras el niño está descubriendo el mundo y piensa que todo lo anterior a la era informática es prehistórico, su padre tiene una mirada adulta que le permite observar las cosas con mayor distancia.
Además de algunos trabajos de Paz, la muestra se completa con tres textos de Santiago Varela, quien fue el guionista de los monólogos de Tato Bores. Varela señala que en Acción su humor “es una sátira política” y reconoce que su fuente de inspiración es “la realidad”. “Uno –sostiene Varela– hace una caricatura de la realidad. Es como el dibujante, solamente que con la palabra. Pero igual es una caricatura y el lector también tiene que conocer de qué estamos hablando. Nadie hace una caricatura de alguien que no se conoce. Por eso, en general, en el humor político no se busca la información reservada, la interna o el radiopasillo, sino que se busca la información que es pública, que la gente conoce. Entonces, ahí se puede hacer una caricatura o una parodia de eso.”
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux