“Se habla mucho de que en Estados Unidos está creciendo la población española, que es el segundo idioma, pero lo que no se dice es que ese segundo idioma es muy despreciado”, señala Ivonne Bordelois. “Los hispanos hacen cualquier firulete para que no se perciba su condición porque, apenas se nota, descienden muchos escalones en el status social”. La lingüista y poeta, que participó en el Congreso de la Lengua en Rosario, señala que lo que habría que hacer es ingresar en Estados Unidos no sólo por los números sino también por la calidad, que habría que entrar a las universidades. “A los estadounidenses les cuesta mucho asomarse a los otros”, explica Bordelois. “Tuvieron a grandes pensadores como Susan Sontag, que siempre fue atraída por lo otro, pero desdichadamente Sontag no está más, y no hay muchos que la reemplacen.”