REUNION DE PUEBLOS ORIGINARIOS DE AMERICA
Otra cumbre, pero distinta
Los pueblos indígenas se están organizando para resistir la ola de expoliaciones culturales, económicas y sociales que parecen avecinarse junto con la IV Cumbre de las Américas de Mar del Plata. Bajo el lema “Determinar nuestro futuro guiados por nuestras enseñanzas tradicionales y la madre Tierra”, representantes de pueblos originarios de todo el continente se reunirán hoy, mañana y el sábado en el Centro de Exposiciones (Alcorta y Pueyrredón) para articular una propuesta cultural y política que se enfrente con las prerrogativas que George W. Bush trae bajo el brazo. La Segunda Cumbre de Pueblos Indígenas de las Américas, que se iniciará hoy a las 8, se propone como un espacio que permita a los pueblos indígenas hacer su aporte al mundo, garantizando el acceso igualitario a las tierras y los recursos naturales e implementando el derecho a la autodeterminación.
La reunión, organizada por la Organización de Naciones y Pueblos Indígenas de Argentina (Onpia) y la Asamblea de las Primeras Naciones de Canadá (AFN), contará con varias charlas. Los temas a debatir son múltiples y variados y se relacionan con la lingüística, la espiritualidad, los asuntos vinculados a la propiedad intelectual y el patrimonio cultural de los indígenas. Habrá también un espacio para conocer artes y artesanías de las tribus participantes. Víctor Capitán, dirigente de Onpia y organizador, declaró que “en la medida que no se respete a nuestros pueblos y no se garantice la pluralidad de culturas, la democracia va a seguir siendo débil en todo el continente. Es hora de construir estados verdaderamente multiculturales”. Y destacó que “lo importante es que se respete la diversidad, y no sólo la indígena. De otra manera, el diálogo se hace imposible. Dado que los indios americanos ocupamos espacios estratégicos en lo que a recursos naturales se refiere, de no concretarse la comunicación corremos el riesgo de ser los próximos talibanes. Tenemos que empezar a intercambiar ideas, porque América latina puede ser el próximo Irak”.