MUSICA › JUAN CAMPODONICO MOSTRARA HOY CAMPO Y REMIXES & RAREZAS, EN NICETO CLUB
El músico, DJ y productor montevideano es la mano derecha de Gustavo Santaolalla en Bajofondo y trabaja con el Cuarteto de Nos, pero su proyecto solista “adquirió personalidad propia”. “Con mi música aspiro a generar inquietudes”, afirma.
› Por Yumber Vera Rojas
Tres años después de que lanzara Campo, el músico, compositor, productor y DJ estiró el montevideano Juan Campodónico la longevidad del homónimo álbum debut de su laboratorio sonoro con un trabajo de rarezas y remixes (titulado justamente de esa manera), que presentará hoy, a las 21, en Niceto Club (Niceto Vega 5510). “Este disco es importante porque no es un producto, sino un planteo artístico basado en la idea de la reversión”, argumenta Campodónico, algo así como la mano derecha de Gustavo Santaolalla en Bajofondo. “Campo nació como un proyecto de estudio. Una vez que estuvo listo el primer álbum, salí a presentarlo, y tuve que expandir el repertorio porque se quedaba corto. Así que para el show en vivo incluí nuevas canciones que terminaron formando parte de este material, a las que se sumaron los temas que dejé afuera de Campo, remixes que hicieron algunos amigos, e información que se fue juntando mientras se fue conformando la banda con la que estoy tocando. Por lo que teníamos un montón de música que quisimos plasmar antes de sacar el segundo disco.”
–A diferencia de su primer disco, Remixes & rarezas no cuenta con el respaldo de Bajofondo. ¿A qué se debió?
–El primer disco decía Bajofondo presenta a Campo porque venía de ahí. Aunque luego me di cuenta de que no tenían nada que ver, pues el concepto de este proyecto adquirió personalidad propia.
–Cuando apareció Bajofondo, Santaolalla, frente a la etiqueta de “tango electrónico” que recibió el colectivo, se refirió a la propuesta del proyecto como “música contemporánea rioplatense”. ¿Este disco se rebela a ese concepto o lo reafirma?
–Que Gustavo haya negado que Bajofondo hiciera tango electrónico no quiere decir que no tuviera tango ni electrónica, porque es más complejo que eso. En el caso de Campo, si es electrónico o no deja de ser relevante debido a que las influencias que se desprendieron de ese género, como el hip hop o el techno, están presentes, al igual que en otros artistas y estilos de la música actual. Lo que es interesante de este proyecto es que es moderno, pero mirando al mundo desde Sudamérica. Sin embargo, somos muy conscientes del resto del continente, por lo que mi paisaje sonoro incluye desde cumbia villera y candombe hasta house. Así que apuntamos hacia un indie pop de tendencias, aunque con un peso muy latinoamericano, porque ser uruguayo no me impide tocar chachachá. Más allá de que nos veamos muy distintos, América tiene muchas características en común. La manera de fusionar culturas es algo muy propio de acá y eso generó sonidos muy nuevos.
–Aunque en la música popular latinoamericana el diálogo entre tradición y modernidad ya ofreció resultados alentadores, cierto colonialismo atenta contra su optimización. ¿Qué propondría para calmar el escepticismo?
–La solución a ese mapa posmoderno del todo vale la tienen los grandes artistas, los que aún pueden decir algo. Y eso surge naturalmente. Bajofondo o Nortec representan una búsqueda de cómo podemos apelar a la contemporaneidad sin dejar de ser nosotros mismos, con nuestras tradiciones. Pero es cierto que para muchos tiene más valor lo que viene de afuera, y más en la generación de ideas. A pesar de los intentos por salir de esa mentalidad y que se dieran avances para ello, existen grandes síntomas de colonialismo. Por más que el mundo está globalizado.
Al tiempo que advierte que Habla tu espejo, el nuevo disco del Cuarteto de Nos, en el que nuevamente ocupó el papel de productor, es el más pop y sencillo del quinteto, Juan Campodónico se sorprende por la ductilidad con la que Diego Capusotto representa la idiosincrasia oriental a través de James Bo. “¡Es muy bueno!”, expresa el artista de 43 años sobre el agente uruguayo y arrepentido de Peter Capusotto y sus Videos, quien en una de sus emisiones reveló que bandas como La Vela Puerca y No Te Va Gustar son parte de un plan para invadir la Argentina. Esto reconoce el impacto que tuvo el rock del vecino país en esta orilla del Río de la Plata en la última década. “Surgió una intención de profesionalizarse y de salir, y muchos grupos lo lograron, más allá de su producto artístico. Hubo ambición y se tendieron puentes. Fue una toma de conciencia nuestra de que somos un país muy pequeño para desarrollar una carrera. También fue una apertura del Uruguay al mundo, tras años de estar encerrado en sí mismo. Eso nos hizo bien mentalmente.”
–Pero en la actualidad la gran estrella pop uruguaya es Pepe Mujica. ¿Cómo repercutió allá el video en el que, tras una nota sobre la legalización del cannabis en su país, el periodista de la revista Vice le pide permiso para fumar marihuana frente a él?
–La noticia corrió. Lo interesante es que Pepe tiene más popularidad ahora que cuando lo votamos. Luego de que se lo eligiera, la gente tenía muchas sospechas de que fuera un desastre. Era una persona rara que después ratificó que las cosas se podían hacer muy bien. Hay una foto que tomó mi hermana, que es reportera gráfica, en la que está en sandalias y shorts junto a señores de corbata graduados en Harvard. Y eso es tener estilo, porque sabe que tiene que convivir con ellos.
–¿Cree que Campo refleja este momento político y social del Uruguay?
–Creo que sí. Con mi música aspiro a generar inquietudes. Ahora que están en campaña electoral en Uruguay, me llegaron pedidos de fuerzas políticas para que las apoye. Me cuestioné si era egoísta al decirles que no, y me di cuenta de que no lo soy, porque lo que hago a nivel cultural afecta a la sociedad en su conjunto. Con Campo descubrí un artista propio que me gusta mucho.
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