CINE › A UNA SEMANA DE LA CEREMONIA, LOS PREMIOS OSCAR SON UNA INCOGNITA
Columnistas especializados, bloggers y apostadores hablan de una lucha feroz entre Avatar y Vivir al límite que puede abrir la brecha a alguna película tapada que venga corriendo de atrás. Y El secreto de sus ojos empieza a ser considerada favorita.
› Por Luciano Monteagudo
¿Qué anda pasando por Hollywood? Pasado mañana cierra el escrutinio en la Academia, los 5700 socios plenos, con derecho a voto, terminaron este fin de semana de enviar por correo su boleta oficial y los sitios web y los blogs están que arden, excitados con la ceremonia del próximo domingo, hasta ahora de final abierto, tanto en las categorías principales como en la del Oscar al mejor film extranjero, que es la que importa por estos lados. “Hablé con una buena cantidad de votantes de la Academia, toda gente muy inteligente, y no tienen ni idea de lo que está pasando”, consignó Anne Thompson en su muy leída columna “Thompson On Hollywood!”, del sitio IndieWire.com. Según esta veterana cronista de la industria, a diferencia del año pasado, cuando Slumdog Millonaire era la ganadora cantada, esta temporada, con la polarizada y cada vez más sangrienta competencia entre Avatar y Vivir al límite, por un lado, y la inflación de candidaturas por el otro (ahora compiten diez en vez de cinco por la estatuilla a la mejor película), los resultados del 7 de marzo se han vuelto impredecibles.
Hay rumores incluso de que la división de votos entre el film de James Cameron y el de su ex Kathryn Bigelow puede abrir la brecha para que se filtre alguno de los otros ocho caballos que vienen corriendo de atrás. La misma Thompson dice que, para su sorpresa, un título que viene escuchando mucho es Up, una aventura de altura, la película de animación de Pixar que parecía puesta apenas para hacer número. Y un especialista como Tom O’Neil, del sitio Gold Derby, muy seguido por los corredores de apuestas, y que se ufana de haber acertado en la ceremonia del año pasado 21 de las 24 categorías, da como ganador para el próximo domingo a... Bastardos sin gloria, de Quentin Tarantino.
Tampoco se sabe qué consecuencias puede tener la metida de pata de uno de los productores de Vivir al límite, Nicholas Chartier, que desafiando normas expresas de la Academia, que prohíben hacer publicidad negativa, mandó un mail a medio Hollywood instando a votar por su película y contra Avatar. Eso, en las soleadas colinas de Beverly Hills, ya no se considera lobby autorizado –como hacer hipócritas funciones de beneficencia por Haití– sino lisa y llanamente campaña sucia. El problema para Chartier (que envió luego, a instancias de la propia Academia, una retractación equivalente a la de Galileo frente a la Santa Iglesia) no es tanto que lo castiguen impidiéndole subir al escenario en caso de que gane la película de Bigelow sino que haya provocado en los votantes veteranos una reacción adversa, inclinando la balanza para el lado contrario al que pretendía.
Según Pete Hammond, que lleva el blog titulado “The Envelope” (El sobre) en el matutino Los Angeles Times, la dificultad de precisar un ganador este año también estriba en que han cambiado las reglas para la categoría principal. Antes, cada votante elegía su película preferida de las cinco candidatas y eso era suficiente. Ahora la nueva boleta implica que debe ubicar las diez películas en orden de preferencia, del uno al diez, lo cual parece ha despertado otras campañas sucias y especulaciones, además de las de Chartier. Según el analista de Hollywood, podría haber votantes que elijan poner, por ejemplo, Vivir al límite en el lugar número uno y Avatar en el diez, con cualquier otra película en el medio (de Precious a Sector 9), con tal de que Cameron no vuelva a proclamarse “Rey del Mundo”, como lo hizo cuando en 1998 Titanic arrasó con casi todas las estatuillas que había en el Kodak Theater.
Pero el mismo Hammond da argumentos a favor de Avatar, quizá muy poco matemáticos, pero sin duda para ser escuchados. Como por ejemplo la voz de un veterano productor de Hollywood, Arthur Cohn, 83 años, ganador de seis premios Oscar que van desde El jardín de los Finzi Contini (1972) al documental One Day in September (2000). El hombre, es obvio, tiene experiencia en los gustos, disgustos y caprichos de la Academia y cuando el blogger le preguntó no qué película quería, sino cuál creía que se iba a llevar el Oscar, Cohn respondió: “Avatar, por supuesto”.
¿Y por casa cómo andamos? El premio a la mejor película extranjera siempre fue uno de los más difíciles de pronosticar, porque no lo vota la totalidad de la masa societaria sino solamente “aquellos miembros activos y vitalicios que hayan asistido a proyecciones de la Academia, u otras exhibiciones, de los cinco films nominados para el premio”, según dicta el reglamento. Pero el crítico Peter Knegt, en su columna de IndieWire.com titulada “For Your Consideration”, se jugó ayer nomás una carta brava y –contra la tendencia que prevalecía hasta ahora, que ponía a la película alemana La cinta blanca como favorita– se jugó abiertamente por El secreto de sus ojos, dándola como ganadora.
Los argumentos de Knegt son muy atendibles. En principio, pone como antecedente la ceremonia del año pasado. Se hablaba de la francesa Entre los muros y de la israelí Vals con Bashir como las dos más fuertes, porque venían de ganar premios y reputación en Cannes... y a último momento se coló la japonesa Fin de partida, que resultó la sorpresiva ganadora. Ahora podría pasar lo mismo con La cinta blanca y Un profeta, Palma de Oro y Grand Prix du Jury de Cannes 2009 respectivamente, también muy celebradas por la crítica estadounidense, pero no necesariamente del gusto de esa élite de la Academia en condiciones de votar en este rubro específico.
Según Knegt, la naturaleza anticonvencional del film de Michael Haneke y la violencia de la película francesa de Jacques Audiard son rasgos que siempre fueron problemáticos para la Academia. En cambio, el film de Juan José Campanella “tiene una narrativa con una vuelta de tuerca que se resuelve de manera bastante poderosa hacia el final y probablemente es una película mucho más fácil de digerir para los miembros de la Academia”. Su pronóstico: El secreto de sus ojos tiene 42 por ciento de chances de ganar contra el 38 por ciento de La cinta blanca, el 12 por ciento de Un profeta, el 5 por ciento de la israelí Ajami y apenas el 3 por ciento de la peruana La teta asustada.
La campaña de prensa de la distribuidora Sony Pictures Classics, responsable del estreno en los Estados Unidos de las tres películas en disputa, también parece darle la razón a Knegt. Hay rumores de que en los últimos días reforzaron acciones y recursos para la película de Campanella. Es un dato que, a la hora de los vaticinios, tampoco conviene soslayar.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux