Las últimas hazañas de James Bond convirtieron a Casino Royale en la película del agente 007 más taquillera de todos los tiempos. El film de Martin Campbell logró recaudar 448 millones de dólares en el mundo entero y superó los 431 millones de dólares que había alcanzado en 2002 Die Another Day, protagonizada por Pierce Brosnan. El nuevo intérprete de James Bond, Daniel Craig, aceptó el papel ante una ola de críticas de los fanáticos de esta saga, que no veían en este casi desconocido rubio de ojos azules un buen actor, mucho menos a su querido agente 007. Sin embargo, casi por unanimidad la crítica reconoció la buena actuación de Craig como el mejor y más sexy espía de Su Majestad. Luego del estreno, el intérprete se consolidó como una estrella internacional y, como todos los actores que han desempeñado este papel, en un “símbolo sexual”. La crítica llegó a calificarlo como “quizás el mejor Bond de la historia”, superando al de Sean Connery, George Lazenby, Roger Moore, Timothy Dalton y Pierce Brosnan, por hacer de su personaje un tipo duro, cruel, pero también vulnerable, que muestras heridas íntimas que le propinó la vida. El éxito sin límites del film llegó hasta Afganistán, donde las tropas británicas pidieron que se proyectara la película en sus bases militares. Sony Pictures recordó que James Bond era un comandante de la Royal Navy antes de unirse a los servicios secretos M16 y por ello acordó enviar varias copias para entretener a unos 5800 soldados británicos.