“Soy Vinnie Jones y soy un gitano hijo de puta. Hoy, gordito, es sólo entre vos y yo”, así recuerda Paul Gascoigne en su biografía que se le presentó a quien llamaban “el psicópata”. Y cumplió. En el partido, le agarró los testículos con ferocidad en una imagen que quedará en los anales del fútbol camorrero. Harry Bell, realizador y productor de Vinnie Jones: Los trabajos más rudos (jueves a las 22 por Nat Geo), larga una sonora carcajada cuando se le pregunta si sucedió algo similar durante el reality: “Es gracioso porque Vinnie se enorgullece de eso. Fue un momento lindo y físico de su carrera, creo. Tengo entendido que por esa foto, Guy Ritchie decidió convocarlo para un papel en Juegos, trampas y dos armas humeantes. Fue como su transición de futbolista recio a hombre de Hollywood recio. En este programa no se trataba de romper el molde de lo que es Vinnie Jones ni de colocarlo en una zona de comodidad. No está actuando: es real. La audiencia puede ver que está en acción. Creo que el momento más terrible para él fue cuando tuvo que escalar un puente en una mina porque les teme a las alturas. Me sorprendió que lo hiciera, o cuando trabajó en las vías de los trenes o como guardaparques, porque la verdad era muy riesgoso y hubo gente que murió haciéndolo. Me saco el sombrero por él. No es una imagen, el tipo es duro en serio”.

De eso se trata el envío, de llevar a Jones, famoso por sus patadas brutales y expulsiones instantáneas en los equipos por los que jugó, del que en películas (X-Men: The Last Stand, Jugar duro) interpreta a villanos carismáticos, a testearse en los trabajos más viriles y espinosos de Rusia. Sea como guardaespaldas, en la construcción de puentes, cuidando osos en una reserva, pescando en altamar, adentro de tanques en una tundra y hasta probándose como ¡cowboy! en los campos de Rusia. ¿Qué puede ser más extremo que vaqueros en la ex URSS? Vinnie Jones arreando ganado por allí. “Con Vinnie creemos que Rusia es uno de los últimos lugares salvajes y naturales de la Tierra. Son entornos fascinantes y por mucho tiempo no supimos nada de ellos”, asegura Bell.

–¿Qué diferencia a su envío de otros programas del tipo?

–Alaska fue registrada con sus camioneros. Hubo programas sobre los buscadores de oro. Pero Rusia es lo inexplorado. Es intimidante pero precioso. Y nada te prepara para su frío. Uno de los motivos era el de mostrar esos ámbitos ignotos, fuimos el primer equipo extranjero en filmar en Kamchatka, lo mismo que con los trenes en el círculo ártico. La otra gran razón es Vinnie en un lugar así. En Rusia todo se maneja de manera diferente, te dan permisos pero llegás al lugar y nadie sabía nada. Era un desafío tras otro.

–¿Pensó en una segunda temporada en otro lugar?

–Sí. Nos gustaría ir a Sudamérica y Oceanía. Tienen lugares bellísimos y mucha vida salvaje que también es famosa por su agresividad. Podría dejar de lado el tema de la seguridad con tal de ir allí.

–¿Cómo fue recibido el programa por la comunidad rusa en Inglaterra en estos días en que se habla de Londongrado?

–No lo sé. Lo que pude comprobar es que los rusos son muy cálidos. Por suerte tenemos puntos en común, ellos llaman al vodka “el agua”, yo soy escocés y la traducción para el whisky es la misma. A muchos lugares a donde íbamos no tenían ni televisión y su contacto con el mundo es a través de DVD. Ven muchas películas de acción. ¡Y siempre conocían a Vi-nnie! Justo cuando rodamos el programa acababa de filmar una película con Sylvester Stallone y Arnold Schwarzenegger, estaba en muy buena forma, pero creo que nada lo había preparado para esto. Es alguien muy genuino, creo que tiene un gran sentido del humor, eso es obvio, aunque algo desconocido es que tiene un gran amor por la naturaleza desde que era chico.