Si bien las cuatro dimensiones (4D) suelen ser un privilegio de la realidad, no es aventurado afirmar que Negro sobre blanco, el programa sobre emblemáticos diarios y revistas argentinos del siglo XX que emite Canal Encuentro, huele a tinta a la vista y olfato de cualquier televidente. Revisitando los semanarios y periódicos de mayor influencia del siglo pasado, el programa periodístico es capaz de transmitir el particular olor que destila la tinta impresa sobre el papel, traspasando la limitación audiovisual del aparato de TV. “A lo largo del siglo XX, aparecieron diarios y revistas que, mirados desde la actualidad, siguen siendo un símbolo. Cada uno en su época y a su manera, innovaron en redacción y diseño, alcanzando influencia social, política, cultura y estética. Negro sobre blanco cuenta sus historias, con sus logros y con sus contradicciones”, señala como introducción a cada uno de los capítulos Carlos Ulanovsky, el conductor del ciclo que se emite los viernes a las 22.30.

Haciendo foco en distintas revistas y diarios argentinos que quedaron en el recuerdo de muchos, Negro sobre blanco es un periodístico que recorre la historia de distintas publicaciones, destacando sus logros más significativos pero sin caer en la melancolía de que todo pasado fue mejor. Reflexionando sobre sus virtudes, pero subrayando sus problemas, el programa pone en perspectiva cada publicación, con cariño pero sin contemplaciones. Negro sobre blanco ya emitió especiales dedicados a las revistas Así, Primera Plana, Claudia, Humor y al mítico periódico La Opinión. En el capítulo del viernes, el foco estará puesto en la revista Anteojito, del que participan Jorge De los Ríos (el dibujante de la mayoría de las tapas), Julia Marta Pucci (directora de la revista), el humorista Liniers y Gustavo Pedrosa, un fanático de toda la obra de Manuel García Ferré. Los siguientes y últimos dos viernes de esta primera temporada analizarán la vida e influencia de las revistas Leoplán y Crisis.

Bajo la óptica amigable a la vez que inquieta de Ulanovsky (el periodista que más ha investigado sobre la historia periodística del país), Negro sobre blanco aborda cada medio con un caudaloso material de archivo y distintas entrevistas a quienes fueron parte de sus redacciones. Sin embargo, la mayor virtud del programa no se limita a su trabajo de producción, sino que se manifiesta en el logrado trabajo de posproducción. La puesta de cámaras, las filminas que “caen” sobre la pantalla y el juego de planos y tipografías que se imprimen en pantalla y rodean a quienes dan su testimonio vuelven dinámica a una propuesta que, definitivamente, no se conformó con únicamente revisar y analizar la historia.