- Marilina Ross: “Lo conocí cuando era muy joven y tengo los mejores recuerdos. Hablamos por teléfono hace muy poquito, estábamos muy cerca y era una gran persona. Lo que me queda de él es el gran amor por lo que hacía, ponía el alma. Terminaba un capítulo y se ponía a escribir el siguiente, dedicaba mucho tiempo al trabajo, ya sea en radioteatro o televisión, era muy apasionado”.

- Guillermo Bredeston: “Con Migré se va un pedazo de nuestras vidas. Muchos de los actores de nuestra generación nos formamos con él y aprendimos de sus consejos. Hace tan sólo un mes estuve almorzando con Alberto y hablamos mucho de proyectos, giras y trabajos en común. Era un hombre sumamente vital, pero a su vez era un filósofo, filosofaba sobre el amor, la vida y la muerte y lo hablaba sin pesimismo, sin angustia, lo hablaba como es, como un autor que vio morir a muchos de sus personajes en las novelas”.

- Nora Cárpena: “Tenía 18 años y me llamaron para hacer la prueba para una novela, para el Teleteatro Palmolive del aire. Entré a la televisión de la mano de Migré, le debo mi carrera y mi familia, ya que por el conocí a Guillermo (Bredeston). Recuerdo que cuando empecé mi romance con Guillermo, cada vez que teníamos un problema o nos peleábamos, aunque no le dijéramos a nadie, él –que era tan receptivo– se daba cuenta y nos peleaba en la novela y cuando nos arreglábamos nos volvía a reconciliar. Creo que ha sido el último autor que quedaba de televisión”.

- Cristina Alberó: “Recuerdo especialmente su pasión por la radio, su talento como persona y como profesional, sus trabajos van a quedar en la historia. Lo conocí hace treinta años durante un almuerzo y luego comenzamos a trabajar juntos, fueron treinta años trabajando juntos. El año pasado trabajé con él en el teatro haciendo el radioteatro, era un hombre muy integral, no sólo escribía, sino que realizaba. Lo más destacable de él era su don de gente, quería recuperar el poder de la palabra para los medios. Era un hombre muy cálido”.

- Irma Roy: “Hablé con él el miércoles porque me venía al festival de Mar del Plata. Esta mañana me senté a desayunar y un periodista me preguntó qué pensaba de lo sucedido, casi me caigo redonda. Hace sólo unos días charlamos y estaba lleno de proyectos, íbamos a hacer el programa de radio otra vez, se quería mudar de radio y además empezaba la gira de su programa de radio en teatro. Era un romántico, un progresista, lo podían ver como un anticuado pero era un visionario. Comprometido socialmente, tenía idea de todo lo que pasaba y lo transmitía como enseñanza a través de sus obras. He vivido cosas maravillosas con Alberto, pierdo un amigo. Murió en plenitud, lleno de sueños. Esta noche pasan en Canal 7, en el programa de Víctor Laplace, un homenaje, el programa se adelantó para hoy antes de que se supiera lo que sucedía, y además Alberto comentaba que estaba muy contento de que lo homenajearan en vida”.

- Tito Cossa: “Lo conocí hace sólo dos años, cuando me llamó para colaborar en Argentores al asumir como director. La entidad me dio la oportunidad de conocerlo como persona. Era un ser excelente, de una gran cordialidad y muy afectivo. Asumió en un momento de una grave crisis para Argentores y él llevó el timón acertadamente. Se va un irremplazable. Tengo muy presente su gran alegría, su buen humor. Quienes lo conocimos podemos dar fe de que estaba un poco dolorido por su falta de convocatoria en los medios en los cuales él había brillado. Eso lo tenía dolorido pero no arrinconado, estaba peleando continuamente por la revalorización del rol del autor”.

- Norma Aleandro: “Trabajé muy poco con él, pero lo reconozco como el precursor de un género y un autor muy reconocido en el ambiente. Quizá lo suyo era visto como un género menor, el mundillo intelectual lo subestimaba y creo que eso fue muy injusto”.