La programación se completó con Brecht, de Walter Jackob y Agustín Mendilaharzu; Como el caracol, de Hilario Vidal, por Chicho Caputo; Constanza muere, con la impecable actuación de Analía Couceyro, dirigida por Ariel Farace; Espectacular espectáculo, de Rudy Güemes; Globotomía, por Urraka; Jettatore, adaptación de Mariana Chaud; La piel del poema, de Ignacio Bartolone; La Pilarcita, aplaudida obra de María Marull; La remolienda, de Alejandro Sieveking; La sangre de los árboles, de Luis Barrales (la nota cholula del festival: actuaba Juana Viale); Monstruos, de Ariel Dávila y Christina Ruf; El regreso, de Carlos Arzulian y Gabriel Páez; Pequeños círculos, gran trabajo de William Prociuk; Todo piola, de Gustavo Tarrío, también muy elogiada; la mendocina y extravagante Tus excesos y mi corazón atrapado en la noche; y Zick Zack Puff, de la compañía Mafalda. También, hubo seminarios a cargo de Lisandro Rodríguez y Emilio García Wehbi. La propuesta llegó a otras tres localidades: Ataliva, María Juana y Suardi.