El trío de periodistas entrevistó a Chabán en la cárcel de Marcos Paz durante seis horas. La nota cierra el libro y ocupa cuarenta páginas: aquí se ofrece un extracto.

Charly García y
Cemento

“Una vez Charly me contó que había tocado en Córdoba y que había sido un éxito. Entonces yo, de envidioso, le dije que no era tan importante si iba mucha gente y tuvo mala onda conmigo, porque un personajito mediocre había enfrentado a una estrella. Muchos años después, estaba sentado en un bar con él, le dije ‘el que se droga apoya al sistema’ y se calentó conmigo.”

Etica

“Trabajar en el espectáculo es trabajar desde una ética. Es decir, vos te ponés ahí, intentás tratar bien a la gente, tratás de cobrar entradas baratas o gratis, tenés buena relación con la gente que trabaja con vos (...) Yo nunca grité ni nada de eso. Es decir, la gente siempre trabajó con amor, Mario en la barra, Raúl en la puerta. Raúl Villareal es muy importante en la historia del rock. Me han dicho que ahora sale a la calle con anteojos y da una imagen muy negativa. Raúl es un tipo muy bueno, muy tranquilo, que estuvo 20 años vendiendo entradas y enseñándoles a los representantes cómo tenían que hacer los números. Y ahora se lo denigra.”

Sociología

“Si vos no entendés la convención del respeto social, de la hospitalidad, de la amabilidad y de que estás junto con otro, que conjuntamente en esta situación de masas tenemos un placer particular, y que nuestras reacciones más irracionales, primitivas y agresivas tenés que dejarlas de lado, o tenés que limitar tus emociones. Si no entendés eso en tu lugar, no te puedo decir ‘hacé esto o lo otro’. Esto tiene que ver con un tema social, un tema familiar. Salgamos y veamos el tema social, porque si no va a parecer que yo soy un salvaje.”

Cromañón

“Cromañón fue una especie de psicosis social. Lo que pasó esa noche fue un acto psicótico. Los medios de comunicación y la gente saliendo a la calle. Fue un acto psicótico y la Justicia empieza a psicotizarse también, en el sentido de que esta angustia por lo que pasó es inabordable desde el punto de vista de los 194 muertos. Es decir, es tan angustiante, tan inabarcable, que empezás a buscar soluciones míticas, sacrificiales. Lo que pasó esa noche empieza a ser metáfora de lo que pasó después en la sociedad, y la Justicia misma empatiza o se identifica con esta situación de psicosis. Es inabordable, no hay figura tipificadora y dada esta angustia, tiene que haber un tapón. Y el tapón es un hombre, no es un material que se vende y que el Estado acepta. No es tres chicos descerebrados que hacen lo que quieren y no respetan a nadie.”