En la Edad Media, las mujeres zurdas eran consideradas brujas; en Japón, motivo suficiente para el divorcio. Hoy todavía se escucha decir que los pájaros que vuelan hacia la izquierda representan mal agüero o que una secretaria que realiza sus tareas eficazmente puede considerarse la “mano derecha” de su jefe.

Durante años, los padres de hijos zurdos obligaron a sus pequeños a utilizar la mano derecha y numerosos “zurdos contrariados” debieron manejarse, a la fuerza, en un mundo “diestro”. Pero quienes utilizan la izquierda han dejado de ser considerados sujetos de discapacidad. Esto, que podría parecer una obviedad, no fue considerado como tal hasta los años ’70, cuando la comunidad científica definió el ser zurdo como una característica más de la persona y dejó de ser considerado como un defecto a corregir.

No obstante, entender por qué una persona es diestra o zurda sigue siendo un enigma que los investigadores aún esperan develar, y hay teorías para todos los gustos. Un grupo de científicos de la Universidad de Oxford cree haber descubierto un gen que otorga mayor habilidad con una parte del cuerpo que con la otra.

El descubrimiento se vuelve relevante en un contexto donde las certezas sobre el “ser zurdo” siempre estuvieron asociadas a la estadística: se sabe que un 10 por ciento de la población tiene esta capacidad, que en este sentido los varones duplican en número a las mujeres, y que si un chico es hijo de padre zurdo tiene 10 por ciento de posibilidades de ser zurdo también; en cambio, en el caso de la madre, el porcentaje de posibilidades del chico aumenta al 20.

UNA HIPOTESIS INSOLITA

A fines del siglo XIX, el historiador inglés y zurdo Thomas Carlyle propuso que como el corazón está en el lado izquierdo, los caballeros de la Edad Media tenían que sostener su escudo con la mano izquierda para protegerlo y de esa manera cualquier arma debía ser portada con la derecha, ventaja de los diestros para sobrevivir y dejar descendencia. Una idea insólita.

A lo largo de la historia las religiones también dijeron lo suyo: el cristianismo decidió que hacer la señal de la cruz con la izquierda era un sacrilegio. El diablo, por su parte, era zurdo.Y los criminólogos pensaban que ser zurdo era un signo de degeneración y maldad. Jack, el destripador de Londres, lo fue.

A DIESTRA Y SINIESTRA

La teoría más aceptada sobre el origen de la “zurdera” proviene de las investigaciones que indican que los cerebros de los zurdos presentan una dominancia del hemisferio derecho, en vez del izquierdo, como sucede en los diestros.

A este hemisferio cerebral derecho se le atribuyen las habilidades espaciales y visuales (por ejemplo, la facultad de imaginar en el interior figuras y formas), la creatividad, las emociones, la capacidad de síntesis y el talento artístico; mientras que al hemisferio cerebral izquierdo se le adjudica la capacidad del lenguaje, la escritura, el pensamiento analítico y la lógica.

En general, un zurdo se maneja mejor con la pierna izquierda y su lado izquierdo es más sensible. Oye mejor con el oído izquierdo, ve mejor con el ojo izquierdo y su visión espacial se orienta por la izquierda. Tiene más sensación táctil en la parte izquierda del tronco. En una tarea en la que son necesarias las dos manos, un diestro tiende a usar la mano derecha como dominante y la izquierda de apoyo, justo al revés que un zurdo.

Esta tendencia de los zurdos corresponde a una lateralización simétrica del cerebro y se acompaña entonces de una dominancia del hemisferio derecho en esta función; eso se da en alrededor de la mitad de los zurdos aproximadamente. El cerebro controla el cuerpo de un modo cruzado y casi siempre el hemisferio izquierdo es el dominante, por lo que la mayoría de las órdenes están destinadas a la parte derecha del cuerpo.

Esto sucede en un alto porcentaje de los diestros, pero no en los zurdos. En ellos, la parte responsable del control del habla y las emociones es la dominante. De allí que algunos consideren a los zurdos como personas probablemente más creativas y visuales que los diestros.

También ellos, según profesan algunas teorías, son bastante buenos en la mayoría de los deportes de pelota gracias a una mayor coordinación entre mano y ojo. Quizás esto podría explicar las genialidades de algunos deportistas como Diego Maradona, Lionel Messi o Manu Ginóbili. Todos zurdos, por cierto.

EL GEN DE LA DESTREZA

La función asimétrica del cerebro que se ve modificada en los zurdos encuentra algunas explicaciones entre quienes trabajan en investigación genética. Ya en 1996, el genetista indio Amar Klar, del Instituto Nacional del Cáncer, en Nueva York, sostuvo la hipótesis de la existencia de un gen que al estar activo en los seres humanos podría determinar el uso habitual de la mano derecha.

En agosto de 2007, un nuevo estudio asoció a un gen, esta vez, con la capacidad de escribir con la mano izquierda. Fue un grupo de científicos de la Universidad de Oxford el que llegó a la conclusión de que el gen LRRTM1 transmitido por vía paterna está altamente asociado con ser zurdo.

Según el informe, publicado en la revista científica estadounidense Molecular Psychiatry, ese agente tendría un papel importante en el control de las partes del cerebro que controlan funciones específicas como el habla y las emociones.

Clyde Francks, director de la investigación y científico del Wellcome Trust Centre, explicó que “esperan que las conclusiones del estudio los ayuden a entender el desarrollo de la asimetría en el cerebro”. Los investigadores descubrieron el LRRTM1 en el marco de un estudio de cientos de familias con hijos disléxicos.

En realidad, lo que buscaban era un nexo entre la dislexia y el hecho de que una persona sea zurda; cuando empezaron el análisis de las muestras genéticas encontraron un cromosoma que parecía determinante en este segmento de población; y al estudiar a fondo el cromosoma hallaron el gen.

Sin embargo, no todos comparten teorías provenientes del campo genético. Para el psicólogo Stanley Coren, de la Universidad de la Columbia Británica en Canadá, la zurdera es la manifestación de algún trauma prenatal. El autor de El síndrome zurdo (Free Press, 1992) cuenta que “los seres humanos somos diestros por naturaleza y la zurdera es resultado de complicaciones durante el embarazo”.

De todos modos hay algunas observaciones que no requieren ser explicadas desde el laboratorio o desde el diván. Los mitos propagados no pudieron cambiar el trazo de zurdos que hicieron historia como Julio César, Napoleón, Alejandro Magno, Juana de Arco, el monarca inca Lloque Yupanqui, el faraón Ramsés II y Luis XVI.

Entre los artistas zurdos, se destacaron Leonardo Da Vinci, Miguel Angel, Rafael y Pablo Picasso. De un puño izquierdo también salió la Teoría de la Relatividad. Y tampoco las leyendas opacaron el brillo de los contemporáneos Bill Gates, Guillermo Vilas o Charly García.

Los zurdos siguen sorteando barreras cotidianas, pero ya cuentan con tijeras, pupitres, abrelatas y numerosos objetos diseñados en especial para ellos. Son una minoría respetable. En Europa y EE.UU. celebran el 13 de agosto como el “Día Mundial del Zurdo”, para demostrar que la zurdera es una particularidad totalmente normal; pese a que sus causas esperen aún las completas y científicas definiciones.