Si fuera vagina sería la de...
Moby Dick.

Si fuera pene sería el de...
Claus El Grande y Claus El Chico.

Ojalá se inventaran los preservativos de...
Piel de asno.

Si mi cama hablara diría...
la bella durmiente.

Quisiera tener dos...
tres chanchitos.

Nadie lo sabe, pero en el baño,
inmediatamente después...
de terminar una función, lloro un poquito.

¿Qué palabras no puede evitar
decir en ese momento?
Abracadabra.

¿A quién le gustaría ver en una porno?
Al soldadito de plomo.

¿Dónde se haría un agujero nuevo?
en la aguja de zurcir.

¿Cuántos son multitud?
Y... los siete enanitos.

¿Qué detalle bajo la ropa le saca las ganas?
Las zapatillas rojas.

¿Cuál es su posición favorita?
La campana.

¿Qué es para usted un polvo mágico?
El jardín florido de la mujer que se
dedicaba a la magia.

¿Cómo le hace saber que es “ahí”?
El patito feo.

¿Cuándo miente?
En el País del Nunca Jamás.

El tamaño no le importa salvo que...
que trate del espejo y sus fragmentos.

¿Qué quiso siempre y nunca tuvo?
Los cisnes salvajes.

Tiene que durar más que...
pero menos que...
la muchachita de los fósforos.
un último hastío.

Felicitas Luna es actriz, bailarina, asistente coreográfica y de dirección. Se desempeñó en este último rubro en obras como El imaginario, de Hugo Midón; Máquina Hamlet, Variaciones sobre B, Hombre de arena, Zoedipous, con El Periférico de Objetos; Viajeros por Shakespeare, de Juan Carlos Gené y Verónica Oddó, y Mujeres soñaron caballos, de Daniel Veronese. Actuó en algunos festivales internacionales con Zoedipous, y con Hombre de arena, en el Festival de Aviñón, en 1999. En 2003 protagonizó La voluntad, dirigida por Guillermo Cacace. En la actualidad actúa en Pelícano, de August Strindberg, con dirección de Luis Cano (los sábados en El Portón de Sánchez; Sánchez de Bustamante 1034).