Llega marzo y el mes no sólo marca el inicio del año escolar sino que suele “meter en caja” el ritmo que llevará el resto del año, sobre todo si una es mujer y tiene mucho trabajo hogareño, además del propio trabajo formal. Es habitual, entonces, que aun teniendo oficina recurramos al trabajo desde casa o a una nueva tendencia mundial: el teletrabajo (trabajar a distancia).

El número de personas que teletrabajan representa el 25% de la población laboral mundial, según cifras del año 2006 de la empresa de investigación tecnológica Gartner. La proyección para el año 2011 estima un porcentaje de 30,4%. En la Argentina, según un estudio de Carrier y Asociados, las oficinas hogareñas (en 2006) serían 800 mil.

Los puntos a favor del trabajo hogareño y el teletrabajo incluyen flexibilidad de horarios, autonomía, y el poder permanecer en el propio hogar. Las contras: extensas jornadas laborales, interrupciones, menor sociabilidad.

Teniendo en cuenta los pros y los contras de esta metodología, hicieron su aparición en el país diferentes sitios destinados a ofrecer espacios laborales flexibles. Por horas, por días o semanas, ofrecen una alternativa, de precios variables que se adapta perfectamente a esta nueva tendencia laboral. Además de las comodidades físicas (desde living de trabajo, boxes individuales u oficinas particulares hasta provisión de dirección postal y teléfono), ofrecen la posibilidad de intercambiar experiencias y conocimientos con gente que está en la misma dinámica y muchas veces en tareas similares. Los precios varían según el lugar, la cantidad de tiempo pautado y las comodidades elegidas.

María Mac Donald es la creadora del sitio yoquevos.com, e-mail gratuito con tendencias en moda, gastronomía y diseño y contenidos para las mujeres. Trabajó durante 8 meses desde su casa hasta que decidió probar hacerlo desde Areatres (www.areatresworkplace.com), pionero en el tema de “oficinas flexibles” en Buenos Aires. “Cuando trabajaba desde mi casa, pasaba días sin salir, decidía sola sin poder compartir nada con nadie y realmente sufría viviendo y trabajando en un solo espacio. Yo tengo mucha pasión por lo que hago y me lleva muchas horas de trabajo. Desde que vengo aquí, tengo un lugar donde generar contactos, ‘tirar’ ideas, recibir consejos, sentirme parte de una comunidad y también me ayuda a mantener un equilibrio personal como emprendedora con límites a través de una oficina que no está abierta 24 horas. Puedo asegurarte que una gran parte del éxito de yoquevos es debido a Areatres.” En ese sentido, Martin Frankel, creador del espacio, admite que el lugar “funciona como una incubadora (estructura de intermediación que ofrecen soporte para el desarrollo de emprendimientos y/o empresas), pero autogestionada”.

Si bien en este tipo de oficinas temporales el porcentaje de mujeres y varones es 50 y 50, si contamos que el número de mujeres que trabajan es menor, esto indicaría una preferencia de las mujeres hacia este tipo de lugares.

Pero no sólo quienes trabajan por su cuenta necesitan un sitio de horarios flexibles e independientes; también quienes trabajan en empresas que están incorporando la tendencia a teletrabajar, alquila oficinas por horas. El 70% de los encuestados dijo acceder a datos corporativos mediante conexiones inalámbricas, según el estudio de Gartner. Hay quienes alternan estos sitios variables con la oficina propiamente dicha. En ese sentido, hay que contabilizar aquí las empresas internacionales que están llevando adelante planes donde sus empleados trabajan desde las oficinas empresariales algunos días a la semana y otros lo hacen desde sus hogares o desde oficinas ocasionales en este tipo de espacios.