Fin tardío del verano. De vuelta en casa. ¿Y ahora qué?

Dolores “Lola” Aguirre (26) y Julieta Ortiz (28) crecieron cómodamente cerca de la costa porteña del Río de la Plata. Son amigas desde hace 20 años. A fines del 2011 planearon las vacaciones que les cambió la vida. Para poder bancar el recorrido hacia el otro lado del charco, por la costa uruguaya, cargaron su mochila con una guitarra y varias canciones.

Llegaron a destino. En Cabo Polonio un amigo las grabó cantando “Ríe chinito”. Grabó esas voces, y a ellas tan lindas en pleno atardecer. Lo subieron a YouTube .¡Me gusta! La cantidad de visitas explotó enseguida. Registraron otra canción. Los videos se compartieron y saltaron muros.

Después de Uruguay fue el turno del interior de la Argentina. Bajaron por Chile. “No tuvimos un minuto para planearlo, la verdad que no. Pero se va armando en el momento de acuerdo con las cosas que van saliendo y las personas que van apareciendo”, dicen.

¡De nuevo en casa! Ya tocaron en un par de lugares chicos de la Capital. Llevaban meses durmiendo afuera. “Pero en toda la gira nos recibieron como si estuviéramos en casa”, afirman.

Los seguidores las adjetivan “dúo cósmico, analgésico y muy pero muy lindo”. Y es literal. Se nota que se dejan llevar por Spinetta, El Príncipe, Chavela Vargas, Simón Díaz. Que crecieron escuchando Beatles, Björk, rock nacional y María Elena Walsh.

“Sólo tenemos un par de temas propios, el resto son cancioncitas de Latinoamérica que nos gusta cantar. Lo estamos disfrutando, eso hace que guste y llegue al corazón. Acá no hay una puesta en escena.”

Guitarra fileteada, pelo rasta, espontaneidad, vestidos hermosos, piel sin maquillaje. Le ponen vida al escenario de un pueblito cualquiera con sus temas a capella, usando boca y mano como instrumento de percusión, cantando de a pie.

Por FB ya se intercambian los acordes de “Canción para el viento”, “El tiempo está”, “Soy el verbo”, “Oh, Chuva” y el más escuchado: “Ríe chinito”.

Antes de ahora, Julieta estuvo un tiempo largo recorriendo Latinoamérica. Lola se dedicaba a las artes plásticas. Después del boom, les dijeron no a las discográficas que les propusieron sacar algo. Piensan, sí, editar un disco pero de forma independiente. “Queremos ir despacio”, saben.

“Perota Chingó es una especie de palabra inventada. El Perota lo tomamos de los uruguayos, que para todo dicen ‘pero ta...’. Como diciendo hoy tuve un día de miércoles, pero ta. Y cantamos un tema que muchas veces repite ‘chingó, chingó’, y nos gustó el sonido. Y así fue que lo relacionamos. Nos gustó cómo sonaba. Perota Chingó, ¡tipo Hakuna matata!”, cuentan. Lindas: disimulan el acento porteño o se lo tragaron ¿avergonzadas? de una vez por todas. Las acompañan Pocho Alvarez y Martín Donoso.

¿Cómo sigue la vida, la carrera, la música? “Como todo, fluyendo como tenga que seguir.”

¿Qué video recomiendan en YouTube, de otra banda?

Rosario Bléfari, Viento helado. Par cantando el rezo diario y Oraçao con A banda mais bonita da cidade.

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