CONSEJITOS DE MARU BON BON
Pruebas que dan fe de la existencia del Punto G
Necesito hacer una confesión, mis muy queridísimos/as amiguitas/os ¡a veces pierdo el Punto G! Tan a menudo me sucede que hasta he llegado a dudar de la ubicación geográfica de tan estratégico ¿montículo? ¿cuerpo cavernoso? ¿eréctil? Vaya a saber, ésas son cosas de especialistas (y no de vulgares divulgadoras, valga la redundancia). En lo que a mí respecta, adorables criaturas/os, soy de las que saben escuchar y así quedé de pasmada cuando una señora muy amable, atendiendo mi desconcierto, me desasnó con una sola frase: ¡Es que este lugar es para dedos, nena!
Así que ya saben, cuando estén a punto de caer en la incredulidad más obtusa recuerden las comprobaciones científicas que siguen a continuación:
1. ¿Por qué cree que hay mujeres que insisten en ponerse en cuatro?: No es para jugar al perrito/a, no es para que el/la otro/a crea que es un burdo animal que ofrece su grupa ¡sencillamente es más fácil llegar al Punto de este modo!
2. ¿Por qué imagina que hay hombres que insisten en el gusto por la propia retaguardia?: ¿Acaso cree que a ellos no les duele? ¿Piensa que obedece a una inclinación/identidad sexual determinada? De ningún modo, unos y otros saben que por ese camino ¡pues se llega a la meca!
3. ¿Por qué piensa que se inventaron los dildos flexibles?: ¿Porque quedan mejor en la mesa de luz? No. ¿Porque el material es más barato? No sea ingenuo/a ¿Por el puro gusto de innovar? Chiquilines y chiquilinas, si existen esos lindos aparatos articulados, con bolitas dentro, con orejas de conejo ¡es porque siempre hay que buscar por la tangente!
4. ¿Por qué cree que hay quien gusta de cabalgar cuando bien podría reposar?: ¿Porque está exhibiendo su estado físico? Nones ¿Porque queda sexy? ¡Uf! ¿Porque lo vio en la tele? Nooo, lo hace porque la libertad de movimientos asegura que la búsqueda lejos de ser infructuosa vaya encontrando el camino del éxito.
Y por supuesto, mis estimadas/os, con los deditos sí, que para algo tenemos nuestras lindas manitas/os.