Marta Maffei, candidata a senadora del ARI en la provincia de Buenos Aires:

–Sí, hay que legislar y educar. Las mujeres superan a los hombres en los promedios y los tiempos de egresados y son excelentes profesionales. Hay que empoderar a las mujeres para que junto a la formación y a su profesión defiendan sus derechos y exijan ser respetadas.

María Elena Barbagelata, candidata a diputada nacional por la ciudad de Buenos Aires del Partido Socialista: –No es un tema que se arregle por decreto. Hay que legislar una ley marco de igualdad de oportunidades con políticas positivas. Por un lado, hay que incidir en las condiciones de las convenciones colectivas de trabajo y en la promoción de mujeres en lugares de poder y, por el otro, luchar contra la segregación en el trabajo.

María José Lubertino, candidata a diputada (nacional y porteña) por Espacio Abierto: –Yo presenté un proyecto de ley en el 2003 sobre la incorporación de la perspectiva de género en la ley de empleo y la paridad entre trabajadores y trabajadoras que incluiría reformas en el trabajo público y privado para impulsar cuotas con el objetivo de que se vaya convirtiendo en paritaria la representación de mujeres y varones en el ingreso laboral y en los ascensos. En las empresas privadas hay que incentivar el premio a la paridad (con un sello de calidad sobre igualdad salarial y beneficios para trabajadoras). Pero primero el Estado tiene que dar el ejemplo.

Patricia Walsh, candidata a diputada nacional por la ciudad de Buenos Aires por MST-Unite: –Del mismo modo que el trabajo en negro o el trabajo infantil no se le puede pagar menos a las mujeres porque la igualdad está garantizada hasta por la Constitución Nacional. Pero esto no se cumple. Hoy en la ciudad de Buenos Aires hay alrededor de 20 inspectores para la totalidad de las empresas. Por eso, no es un problema de nueva legislación sino de controlar y de movilizarse a favor del derecho de las trabajadoras.