“Cambiasso me decía que me tirara siempre al mismo lado, que alguno iba a atajar, pero no le hice caso. Cuando uno está ahí, sabe que lo importante es no cambiar la idea que se tiene, elegir una punta y, si se acierta, sacar la pelota.” Al atajarle el penal a Ricardo Osorio, Germán Lux se convirtió en el héroe de la clasificación argentina a la final de la Copa de las Confederaciones.
“El partido fue muy largo y muy cansador para todos los jugadores. Pienso que en los penales lo decisivo fue ver quién estaba mejor físicamente, y también un poco de suerte”, afirmó el arquerito. “Yo elegí un palo y me arrojé siempre para ese lado. Si la pelota venía a ese costado, había que tratar de sacarla. Y eso fue lo que ocurrió.”
“Teníamos confianza de que ganaríamos. En el gol ellos también tuvieron suerte, porque en mi visión el jugador (Carlos Salcido) trató de tirar un centro, pero la pelota le pegó a Fabricio (Coloccini) y se metió. Y el equipo ahí se lanzó con todo a buscar el empate”, relató.
Después de que Lux contuviera el penal, Cambiasso convirtió el de la clasificación. “Pienso que casi sin merecerlo estábamos a 10 o 15 minutos de estar fuera de la final. Pero creo también que estamos en la final porque el equipo tuvo el coraje de salir a buscar ese resultado”, aseguró el volante. “No hicimos las cosas como todos queríamos. Pero hay que tener en cuenta que este equipo de México es muy difícil, juega bien al fútbol.”
Luciano Figueroa, autor del gol del empate, explicó la conquista: “Cuando le pegué a la pelota tuve algo de suerte, porque pasó entre las piernas del arquero y se fue lentamente hacia adentro. Quería soplar la pelota para que entrara”, bromeó.
Javier Zanetti, que jugó su centésimo partido con la Selección, afirmó que “es necesario saber jugar partidos como éste ante México, sin espacios y con mucha presión. Argentina supo jugarlo”. Javier Saviola reconoció que su expulsión fue justa. “Sí, quizá levanté demasiado la pierna”, afirmó el delantero, quien también aseguró que no volverá al Barcelona.