Esperanzados con la posibilidad de sumar su primera victoria en el Clausura luego del empate de la semana pasada ante Central, casi 20 mil simpatizantes de Racing se acercaron desde bien temprano hasta el Cilindro de Avellaneda. Sin embargo, tan pálido y pobre es el presente de este Racing de Diego Simeone que aun mereciendo quedarse con el triunfo, como pasó en la tarde de ayer, sus ilusiones se desdibujan rápidamente con el correr de los minutos para terminar sufriendo hasta el último minuto. Ayer empató 0-0 con Lanús pero, a diferencia del clásico ante Independiente –su último partido jugado como local en Avellaneda–, la gente despidió al equipo con un tibio aplauso para premiar su esfuerzo.

Para enfrentar al práctico Lanús de Cabrero, que venía de sumar su cuarto triunfo como local ante Gimnasia, Simeone repitió el mismo esquema táctico que utilizó en Rosario, aunque dispuso los ingresos de Carlos Arano y Lucas Valdemarín, en reemplazo de José Shaffer y del chileno José Villanueva.

Apoyado en el criterio de Sebastián Romero para cortar y jugar, y en las ganas de Moralez, Racing generó al menos diez chances claras de riesgo en la primera mitad pero, en todas ellas, careció de la tranquilidad necesaria para definirlas con criterio.

En el inicio del encuentro, de un tiro libre muy favorable, Lanús casi termina yendo a buscar la pelota dentro de su arco. Graf estrelló su remate en la barrera, y luego del rápido contragolpe de Racing, Graieb alcanzó a tapar a Luna, cuando estaba a punto de fusilar a Bossio. En la siguiente llegada, Barroso definió apenas desviado después de una buena doble pared con el ex delantero de Tigre.

Cuando Graieb debió esforzarse para enviar al corner el enésimo centro desde la izquierda, quedó claro que Ledesma no podía controlar a Moralez. En un instante de inspiración, el pequeño mediocampista gambeteó a dos rivales y dejó a Valdemarín mano a mano con Bossio, quien con su cara pudo desviar el zurdazo del ex delantero de Vélez. Minutos después, Torres desperdició dos chances; Moralez definió apenas desviado luego de una apilada maradoniana y, cerca del final, el pibe casi desata el festejo con un cabezazo de pique al piso que Bossio alcanzó a manotear milagrosamente.

La chance más clara de Lanús en todo el partido ocurrió cerca del entretiempo: Biglieri envió un centro preciso desde la derecha, Aguirre, de cabeza, intentó colocar la pelota en el ángulo derecho y Campagnuolo voló espectacularmente enviando el balón al corner.

Los aplausos con los que la gente de Racing recibió a su equipo luego del entretiempo se fueron diluyendo con el transcurso del complemento, cuando advirtieron que sus jugadores estaban exhaustos y ya no generaban jugadas de riesgo. En el final, el esperanzado hincha de Racing aplaudió el esfuerzo, pensando en que quizás ante Instituto se acabe la malaria.

Informe: Carlos Altea.

RACING-0 Campagnuolo-6 Barroso-5 Menghi-5 Cabral-6 Arano-6 Romero-6 De la Fuente-5 Torres-6 Moralez-8 Valdemarín-5 Luna-5 DT: Simeone

LANUS-0 Bossio -7 Ledesma-5 Gioda-6 Romero-6 Graieb-5 Aguirre -5 Pelletieri-6 Quinteros-6 Leto-5 Biglieri-5 Graf-3 DT: Cabrero

Estadio: Racing.
Arbitro: Héctor Baldassi.
Cambios: 42m Manicero (5) por Biglieri (L); 60m Mirosevic (5) por Moralez (R); 72m Estevez por Valdemarín (R) y Fabbiani por Manicero (L); 85m Archubi por Graf (L).