El Barcelona y su estrella Lionel Messi vieron rendida a sus pies a toda la prensa española, encandilada por el histórico 6-2 de los azulgranas ante el Real Madrid en el estadio Santiago Bernabeu. “¿Cuántos blancos serían titulares en el Barça?”, se preguntó el diario Marca, que señaló al rosarino como el gran ganador de los duelos individuales y destacó su respuesta satisfactoria en un duelo de tal magnitud. “Este año se lo va a comer todo: el Balón de Oro, el FIFA World Player, el Trofeo Di Stéfano. Un número 1 que le ha costado cero euro al Barça”, destaca. “Messi puso en jaque a la defensa madridista durante todo el encuentro, desbordando con velocidad y gambetas”, lo elogió As. Para gran parte de la prensa, la clave del gran papel del delantero estuvo basada en su peculiar ubicación dentro del campo de juego. El entrenador Josep Guardiola optó por posicionarlo apenas unos metros detrás de Thierry Henry y de Samuel Eto’o y por el centro del ataque visitante. Así, el rosarino encontró facilidades en las espaldas de Diarra y Fernando Gago, y la diferencia de velocidad y reacción con respecto a los centrales Fabio Cannavaro y Cristoph Metzelder. “El técnico sabía las ganas que tenía Leo de hacer un gran partido. La ansiedad no forma parte de su vocabulario, pero los fenómenos se consagran en los partidos importantes y Messi tenía ganas de un encuentro así”, argumentó Mundo Deportivo. Con sus dos tantos convertidos, llegó a un total de 23 goles anotados en el campeonato español. De tal manera, junto a los 27 que cosecha Eto’o y los 19 de Henry, ya forma parte del trío más efectivo de la historia de la Liga, con 69 goles. El trío superó a la histórica sociedad del Real Madrid de la temporada 1960-61 conformada por Ferenc Puskas (28 goles), Alfredo Di Stéfano (21) y Luis Del Sol (17). “Messi sentó cátedra con otro de sus goles catedralicios. Uno más para su colección”, explicó Sport, en referencia al segundo tanto anotado por el argentino.