River se trajo un punto de La Plata. Tras un pésimo primer tiempo, el equipo de Astrada modificó su imagen en la segunda parte y el premio a ese cambio fue el empate sobre la hora de Gustavo Canales, que sirvió para oxigenar un poco la semana. Para Gimnasia, la igualdad fue un castigo por las ocasiones que dilapidó cuando mandaba en el de-sarrollo y por la actitud mezquina que tuvo en gran parte de la segunda mitad. Por eso dejó pasar una buena ocasión para acercarse a Racing y Central en la tabla de los promedios.

La gran diferencia de Gimnasia y River estuvo marcada por la actitud. En la primera etapa, mientras los locales iban con notable convicción a luchar cada pelota, el compromiso de los visitantes parecía muy diferente. Por eso, de entrada quedó establecida una superioridad en el desarrollo que rápidamente también se reflejó en el marcador. Ormeño trepó por la derecha y envió un centro al segundo palo, donde Pérez le ganó en lo alto a Villagra y metió un cabezazo violento para vencer a Vega.

Luego de la rápida ventaja, Gimnasia se encargó de justificarla en el juego. Con la ubicación de Rinaudo, el equipo de Cocca impuso su presencia en la mitad del campo, donde no tenía inconvenientes para recuperar la pelota. Así se encargó de partir a River, que tenía a Villalva y Canales aislados arriba y no encontraba volantes que pudieran generar juego. Y para colmo, en la última línea sufría con la velocidad de Pérez, que aparecía por los dos costados y lastimaba a una defensa mal parada y sin coordinación. El único problema para los platenses pasaba por las resoluciones del colombiano, que no siempre terminaba bien lo que insinuaba y muchas veces elegía la peor opción. Sólo por eso no llegó el segundo tanto, en especial cuando Ormeño lo habilitó, pero Pérez le dio la pelota en las manos a Vega, cuando tenía a Stracqualursi sin marcas por el centro.

Superado en el desarrollo, River apenas se acercó al arco de Sessa con maniobras alejadas del contexto del juego. Primero tuvo una buena ocasión con un remate desde afuera del área de Ahumada que desvió el arquero. Y luego, Ormeño salvó sobre la línea ante un cabezazo de Canales (la jugada se repitió en la segunda parte). Recién en el complemento, con el ingreso de Gallardo, River encontró más juego. Además, aprovechó que Gimnasia se desdibujó. Se retrasó, perdió la pelota y, para colmo, dilapidó todas las ocasiones que le entregaba un River regalado en el fondo.

Entonces, obligado por las circunstancias, el equipo de Astrada se adelantó en el terreno y arrinconó a su rival. Es cierto, no tuvo demasiada claridad, pero empujó con otra actitud respecto de la primera mitad. Y con eso le alcanzó para convertir en figura a Sessa, clave al tapar un par de remates desde afuera de Abelairas y Gallardo. Pero tras el enésimo error de Maldonado, Funes Mori habilitó a Canales para que el rionegrino consiguiera su primer gol en el club y entregara algo de tranquilidad para la semana.

Estadio: Gimnasia.

Arbitro: Gabriel Favale.

Goles: 8m M. Pérez (G); 90m Canales (R). Cambios: 45m Gallardo (6) por Barrado (R); 59m Funes Mori (6) por Villagra (R); 69m Castro por Encina (G); 71m Cuevas por M. Pérez (G); 77m Affranchino por Rojas (R); 80m Villar por Aued (G).