Fue una victoria fundacional de Estudiantes. Porque acaso sentará las bases para una reconstrucción que asoma imprescindible luego de un año tan malo. Desde lo futbolístico, lo emocional y lo simbólico resultó muy diferente este equipo que por ahora conduce de manera provisoria Juan Manuel Azconzábal, de aquel inexpresivo y apático que selló el ciclo de Miguel Angel Russo. Tanto que mereció el triunfo ante Arsenal por 2-1 mucho antes de concretarlo con un gol de tiro libre de Juan Sebastián Verón (¿el último de su carrera?) a diez minutos del cierre del partido en Sarandí.

En el primer tiempo, Estudiantes se fue perdiendo 0-1 (gol de Mauro Obolo a los 21 minutos). Pero no debió haber sido así. Arsenal nunca alcanzó a ser más. Y Mauro Boselli desperdició tres situaciones claras que habría convertido en otro momento más fecundo. Lo mejor vino luego. Cuando en la segunda etapa, el equipo de La Plata afirmó aún más su decisión de manejar la pelota, adelantó sus líneas y se propuso primero empatar y luego pasar a ganar con una actitud y una energía inéditas en este semestre tan desencantador. Y que parecieron mucho mayores comparadas con la pasividad que invadió a Arsenal hasta el final.

La igualdad llegó pronto. A los 10 minutos, Mariano González lanzó un centro desde la derecha que Gastón Fernández anotó con un toque corto entrando por el segundo palo. Pero Estudiantes no se dio por satisfecho. Continuó repiqueteando sin excederse en centros y pelotazos. Todo lo contrario: hizo correr la pelota por abajo y abrió el juego por las bandas donde Mercado y sobre todo Iberbia hicieron diferencias. Tirado atrás, pero también yendo por los costados, Verón lideró los mejores momentos estudiantiles, indicándoles a sus compañeros los caminos de buen fútbol que debían recorrer. Fue un acto de estricta justicia que haya sido él y no otro el autor del gol de la esperada y necesaria victoria.

Estudiantes en algún momento debía volver sobre sus pasos. Y lo hizo ayer. Acumulando mérito sobre mérito con una decisión y un fútbol que creía perdidos en el tiempo.

Estadio: Arsenal.

Arbitro: Sergio Pezzotta.

Goles: 21m Obolo (A), 55m G. Fernández (E) y 80m Verón (E).

Cambios: 61m Leguizamón por Zelaya (A) y Nervo por Torres (A), 72m M. Fernández por Iberbia (E), 75m Cardozo por A. González (A), 78m Galván por M. González (E) y 86m Carrillo por G. Fernández (E).