El plantel de San Lorenzo cerró ayer la primera parte de la pretemporada, tras entrenarse en el estadio Juan Montoza de su homónimo de Mar del Plata y luego gozar de la tarde libre por primera vez desde que arrancó con las tareas. Tras una entrada en calor que consistió en ejercicios de pase y recepción, la práctica se centro en trabajos con pelota. Primero, el entrenador, Leonardo Madelón, planificó un ejercicio de tenencia de balón, y luego otro con pases a tres toques entre tres equipos.

El volante Leandro Romagnoli, con una ampolla en el pie derecho, y los delanteros Bernardo Romeo y Carlos Bueno –flamante incorporación– con leves sobrecargas musculares, se entrenaron con la misma intensidad que sus compañeros, luego de trabajar diferenciado el sábado. Por su parte, el arquero Pablo Migliore volvió a ejercitarse junto a los kinesiólogos del club, para intensificar su puesta a punto. En tanto, hoy por la mañana, el plantel retomará la actividad en el gimnasio para trabajos de musculación.

En otro orden, Madelón señaló que en junio ve al equipo “contento y festejando, con el objetivo cumplido de mantener la categoría”, y apuntó que “la confianza” en los jugadores es la mejor forma de trabajar.

Sobre las incorporaciones, el DT indicó que el regreso de Germán Voboril es importante porque “cubrirá el puesto de lateral por derecha”, y aseguró que la llegada del uruguayo Carlos Bueno “jerarquiza al equipo”.

No obstante, a este San Lorenzo le falta una pieza y todos los cañones apuntan al volante de Godoy Cruz, Diego Villar. “Me dijo que quiere estar en un club grande como éste. Me gustaría que el tema se defina en dos o tres días”, pidió Madelón en diálogo con Télam.

Sin embargo, la operación no será sencilla. El presidente de Godoy Cruz, Mario Contreras, avisó que para llevarse al mediocampista habrá que poner “mucho dinero”, y señaló que lo único que llegó de San Lorenzo fue un fax con una propuesta que “no conformó en absoluto”. “Nunca me preguntaron cuánto pedía por el jugador. No hablé con nadie aún”, aseguró Contreras.