Alianza de Coronel Moldes, equipo cordobés que nació en 2007 de la fusión de tres clubes (Toro, Everton y Belgrano), vivía ayer su noche soñada. Le ganaba a Independiente por 1-0 y lo dejaba afuera de la Copa Argentina. Pero a los 86 minutos apareció Ortiz, de cabeza, para sellar el empate y llevar la definición a los penales. Ahí los cordobeses se quedaron sin nafta. Y los dirigidos por Almirón, que ya habían sido silbados por sus propios hinchas, se impusieron 4-1 para avanzar a los 16avos.

Con un baldazo de agua fría, así arrancó Independiente su debut en la Copa Argentina frente a Alianza de Coronel Montes, un modesto equipo del sur cordobés que juega el Federal B y marcha último en su zona, la 17.

Sin embargo, la desgracia estuvo del lado de los de Avellaneda, que se vieron sorprendidos desde el arranque por los muchachos de Alianza, que a los 6 minutos les ganaban por 1-0, con un golazo de Reynoso, quien aguantó la presión de Papa dentro del área y, con una maniobra espectacular, giró y remató para vencer a Montoya.

La reacción que se esperaba del Rojo tardó en llegar. Es que el modestísimo equipo cordobés, con futbolistas amateurs y de los más variados oficios, lo complicaba y, prácticamente, no lo dejaba llegar sobre el arco de Airaudo, un arquero-panadero, que ayer le tapó varias a Valencia y un cabezazo de gol a Benítez, a los 19 minutos. La primera chance más o menos clara para el Rojo había llegado apenas unos minutos antes, a los 14, tras un rebote, con un remate de Villalba que Gagnolo tapó apenas delante del arco.

Independiente se fue al vestuario otra vez silbado por sus propios hinchas, y quizás eso motivó a Jorge Almirón a cambiar para la segunda parte, donde ordenó el ingreso de Pizzini por Breitenbruch. Pero Alianza estaba jugando el partido de su vida y ni siquiera la diferencia de niveles entre ambos planteles parecía incidir en el trámite.

Entre los cordobeses se destacaba Tello, un muchacho que vive debajo de la tribuna del estadio de Moldes; Reynoso, el autor de un gol que bien pudo ser histórico, y Salazar, el capitán del equipo, que alguna vez fue técnico, pero volvió a ponerse los botines. Era una noche soñada, perfecta para el conjunto cordobés, pero Ortiz les aguó la fiesta con la igualdad, que llevó el trámite a la definición por penales.

Estadio: Mario Kempes (Córdoba).

Arbitro: Sergio Pezzotta.

Goles: 9m Reynoso (A); 86m Ortiz (I).

Cambios: 46m Pizzini por Breitembruch (I), 60m Lucero por Villalba (I), 70m Ortiz por Valencia (I), 74m Aveiro por Núñez (A), 81m Cardetti por Reynoso (A).