El tenista escocés Andy Murray se metió en su primera final de un Grand Slam, precisamente su favorito, el Abierto de Estados Unidos, donde hoy desde las 18 tratará de poner fin al reinado de Roger Federer en Nueva York. Precisamente, el suizo (número 2 del mundo) ha ganado en la últimas cuatro ediciones. La hazaña de Murray, futuro 4º del mundo, fue superar en un partido de dos días al español Rafael Nadal 6-2, 7-6 (5), 4-6 y 6-4. Ahora va por más.

Murray será un rival muy complicado para Federer, quien tras el golpe anímico que le significó perder la final de Wimbledon, logró jugar muy motivado estas dos semanas, exteriorizando sus sentimientos como hacía muchos años que no se lo veía, y con ganas de demostrar muchas cosas tras haber perdido el número uno del ranking mundial en manos de Nadal.

El suizo ha ganado los últimos 33 partidos que ha disputado en Flushing Meadows y una victoria más en este torneo le permitiría sumar el decimotercer Grand Slam de su carrera y situarse a sólo uno del estadounidense Pete Sampras, que posee el record absoluto.

Federer, que tras la final de Wimbledon perdió en su primer partido en Toronto, el segundo en Cincinnati y cayó en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Beijing, se planteó este Abierto de Estados Unidos como una reválida y en algunos encuentros, como ante el checo Radek Stepanek y, sobre todo, en la semifinal ante el serbio Novak Djokovic, volvió a maravillar con su tenis, elegante y eficaz.

Enfrente se va a encontrar a un Andy Murray (cuando termine el torneo quedará como 4º del mundo) que viene de jugar un gran tenis sobre pista dura y que consiguió quedarse con el último Masters Series en Cincinnati, tras derrotar en una gran final a Djokovic.

Murray ha desplegado un gran tenis en el Abierto de Estados Unidos en su tercera presentación en este torneo, donde se ha destacado por su gran inteligencia a la hora de plantear los partidos y la variedad de su juego. El escocés y Federer nunca se enfrentaron en un partido de Grand Slam, aunque en los tres enfrentamientos que se han cruzado, también sobre carpeta, el balance es favorable para el británico, que lo venció este año en Dubai y en 2006 en Cincinnati; mientras que el único triunfo del suizo fue en Bangkok en 2005.

Para llegar a esta final, Federer venció al argentino Máximo González, al brasileño Thiago Alves, al sueco Stepanek, al ruso Igor Andreev, al luxemburgués Gilles Muller y a Djokovic. Por su parte, Murray dejó en camino al argentino Sergio Roitman, al francés Michael Llodra, al austríaco Jürgen Meltzer, al suizo Stanislas Wawrinka, al argentino Juan Martín del Potro y, finalmente, a Nadal, frente a quien ayer completó su partido de semifinales que se había suspendido por lluvia, imponiéndose por 6-2, 7-6 (5), 4-6 y 6-4.

Nadal, que comenzó el encuentro dos sets abajo, consiguió hacer valer el break que traía de la jornada del sábado y forzó el cuarto set, en el que llegó a ponerse arriba con un quiebre de servicio. Pero el escocés, con un gran tenis y variando mucho el juego al español, consiguió dar vuelta la situación y terminó llevándose la cuarta manga por 6-4, para dejar afuera de la final al número uno del mundo, que había llegado al torneo con un registro de 54 triunfos en 56 partidos y tras haber logrado los títulos en Roland Garros, Wimbledon, Queen’s, Masters de Toronto y la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.