Con el orgullo herido, la Selección Argentina de Básquetbol reaccionó. En dos días consecutivos vivió dos situaciones límite en el Premundial de Puerto Rico, y en ambas ocasiones sacó a relucir su temple para superarlas. El sábado, era vital ganarle a Panamá para seguir con chances de avanzar a la siguiente ronda y lo consiguió por 25 puntos, 80-55, para ganar confianza. Y anoche, con el pasaje a la segunda ronda asegurado pero con la obligación de triunfar para afianzar sus chances de obtener una de las cuatro plazas mundialistas, volvió a dar una muestra de carácter al superar 89-87 a República Dominicana, en tiempo suplementario tras igualar en 74, y dejar en claro que llegar a Turquía no está tan lejos.

Con la derrota de Panamá ante Brasil, el equipo de Sergio Hernández ya sabía que el pasaje a la siguiente ronda estaba asegurado. Sin embargo, por el sistema del torneo, una victoria ante Dominicana, un rival que cuenta con Francisco García, Charlie Villanueva y Al Hordford, tres NBA de buen nivel, valía doble: si Argentina perdía, los clasificados a la siguiente instancia eran Brasil, Dominicana, Venezuela y Argentina, en ese orden. Y lo peor era que el equipo de Hernández hubiese arrastrado sólo tres derrotas y ninguna victoria para la tabla de la siguiente ronda, donde se cruzará con los cuatro clasificados de la otra zona, Puerto Rico, Uruguay, Canadá y México. Pero como ganó, el eliminado de su grupo resultó Venezuela, con lo que para la instancia decisiva Argentina arrastrará sus dos triunfos y sólo la caída ante Brasil. Ante ese panorama, dos victorias en la siguiente fase podrían darle uno de los cuatro pasajes al Mundial. El juego de ayer se caracterizó por la paridad. “Fue un juego de valientes y agresivos en busca del triunfo como la final del mundo”, calificó al partido Hernández. Si bien Argentina logró sacar una diferencia en el primer cuarto, los dominicanos pudieron neutralizarla rápido. Y con el poder de su juego interno marcaron la tendencia del partido. Por eso, el primer tiempo terminó 43-37 en favor de los caribeños. A partir de ese momento, Argentina corrió de atrás en el marcador. Apoyado en el goleo de Luis Scola, el máximo anotador del partido con 30 puntos, el equipo de Hernández se las ingenió para limar las diferencias, pero apenas consiguió pasar al frente en el marcador de manera muy fugaz.

Por eso, parecía que la victoria quedaba en manos dominicanas, cuando el marcador indicaba tres puntos de diferencia y la bola en poder del adversario, con menos de un minuto por jugar. Sin embargo, Andrés Pelussi convirtió un triple cuando se acababan los 24 segundos de posesión e igualó el marcador. Tras otra buena defensa argentina, a Scola le quedó el triunfo en sus manos, pero el lanzamiento de seis metros pegó en aro y mandó el juego al suplementario.

Allí otra vez le tocó correr de atrás al equipo de Hernández, ya que Dominicana se hizo muy fuerte en el tablero argentino. Tres dobles consecutivos tras tomar rebotes ofensivos le dieron una ventaja a los caribeños de cinco puntos cuando restaban menos de tres minutos. Sin embargo, un triple de Prigioni, un doble con falta de Scola y un triple de Leo Gutiérrez cuando faltaba poco más de un minuto le dieron la ventaja al conjunto argentino. Fue entonces cuando Dominicana intentó el resto y cortó sucesivamente con faltas, pero la efectividad en ese rubro de Juan Pablo Cantero dejó la victoria a resguardo más allá de un triple de siete metros y marca encima de Francisco García cuando quedaban diez segundos. El último intento desesperado del conjunto de Julio Toro, de aro a aro, salió muy lejos, con lo que el triunfo argentino quedó garantizado. “Es un orgullo grande el haber ganado a un rival tan poderoso. República Dominicana tiene más capacidad que fortaleza. El juego en la pintura no decide un juego”, analizó Hernández, eufórico por el triunfo de su equipo.

Ahora será el turno de afirmar la levantada para conseguir la clasificación. Los rivales serán Canadá, Uruguay, Puerto Rico y México, aunque el orden iba quedar determinado luego del partido que anoche jugaban los locales ante los canadienses. Pero lo concreto es que ayer se dio un paso doble para obtener un pasaje.