El mejor nadador del mundo, Michael Phelps, debutó con el oro en el esperado relevo 4x100m libres que ganó Estados Unidos delante de Rusia y Francia, en el Mundial de natación de Roma, marcado por los seis records mundiales que alimentan la polémica sobre la influencia de los trajes.

Los rusos, desde el carril número 8, se mezclaron en la revancha de la final olímpica de antología entre norteamericanos y franceses, que pese a ser favoritos una vez más claudicaron contra Phelps, más allá de contar con el plusmarquista de la prueba reina, Alain Bernard. Los estadounidenses marcaron 3m09s21.

La sirena italiana Federica Pellegrini, que cumplirá 21 años en pocos días, ganó el título mundial de los 400m libre con un nuevo record mundial (3m59s15) incluido, superando su propia marca.

Otra actuación para la historia fue la del alemán Paul Biedermann, que se llevó el título mundial de los 400 metros libres con record del mundo (3m40s07), borrando la plusmarca de 3m40s08 establecida por una leyenda de la natación, el australiano Ian Thorpe, que la guardaba desde julio de 2002.

El relevo femenino de Holanda confirmó su favoritismo y se llevó el oro con record: marcaron 3m31s72. La alemana Britta Steffen estableció un nuevo record mundial en los 100m libre, 52s22 y la sueca Sarah Sjostrom marcó 56s44 en semifinales de los 100m mariposa, otro record mundial. La racha la completó la estadounidense Ariana Kukors, señalando 2m07s03 para los 200 metros cuatro estilos.