Guillermo Cañas culminó una semana brillante al consagrarse hoy campeón del Masters Series de Toronto al superar en la final con contundencia al estadounidense Andy Roddick, por 6-4 y 7-5. Fue el primer triunfo de Cañas en un torneo Masters Series y el tercero en su carrera (ganó en Chenai e India) como profesional. Cañas, quien está siendo entrenado por Hernán Gumy, cumplió una semana impresionante en Toronto, ya que venció a cuatro jugadores top ten, tres de ellos top cinco: Roger Federer (10º), Yevgeny Kafelnikov (5º), Marat Safin (2º) y al alemán Tommy Haas (3º), el único en todo el torneo que le quitó un set y lo tuvo contra las cuerdas en semifinales.
El Abierto canadiense, un Masters Series (los torneos que le siguen en importancia a los Grand Slams y el Masters), reparte 2.950.000 dólares y contó con la presencia de los mejores 30 jugadores de la actualidad. Este resonante triunfo situará al argentino en el puesto número 7 de la Carrera de Campeones y 12º en el ranking mundial a partir de mañana; además, el título de Cañas es el séptimo de un argentino en la temporada, lo que ubica al país como el más ganador del año junto a España y Estados Unidos. El extraordinario momento por el que está pasando el jugador oriundo de Tapiales lo convierte nuevamente en el mejor tenista nacional (David Nalbandian lo había superado por su gran labor en Wimbledon) y le asegura un lugar como singlista en la serie semifinal de Copa Davis ante los rusos que se jugará entre el 22 y el 24 de septiembre, en Moscú.
El argentino, en su cuarta final del año y novena en su carrera, como a lo largo de toda la semana, demostró un nivel superlativo, destacándose por su potencia y mentalidad ganadora en los momentos difíciles de los juegos, algo en lo que ha progresado notablemente.
El partido fue sumamente parejo desde el inicio, ya que cada jugador prevalecía con su servicio, especialmente Roddick, quien es uno de los jugadores más agresivos del circuito en ese rubro. Cañas utilizó su experiencia y algunas mañas para inquietar al juvenil jugador estadounidense, alargando lo máximo posible el tiempo entre cada servicio para tratar de desconcentrar al estadounidense, al que a lo largo del torneo sólo le habían quebrado su servicio en dos oportunidades. Roddick, de 19 años y ex número uno junior, exigía muchísimo a Cañas con su potencia; sin embargo, el argentino se mantuvo expectante hasta que en el noveno game, con el set igualado en 4, “Willy” le quebró el servicio al estadounidense para situarse 5-4 y adueñarse del set (en 33 minutos) con cuatro saques, dejando en cero a su rival en el game.
En el segundo set, Cañas volvió a quebrarle el servicio a Roddick, jugando constantemente con su potente derecha sobre el revés del estadounidense. No obstante, éste aprovechó que el argentino se relajó para quebrarle el saque en el segundo game y continuar igualados, aunque Roddick ya no exhibía la misma potencia que en el primer set, seguramente por el extenuante encuentro de la noche del sábado por la semifinal ante el checo Jiri Novak (13º).
Pese a que el set continuaba parejo con cada jugador manteniendo su servicio, el estadounidense comenzó a cometer muchos errores no forzados (24 contra 4 del argentino) y eso le quitó confianza en su juego. Esto posibilitó que un magnífico y sereno Cañas volviera a quebrarle el saque a Roddick, quien al igual que en el primer set falló en los puntos más importantes, en el undécimo game, para ponerse 6-5. Con su servicio, “Willy” supo que tenía la posibilidad de llevarse el partido y demostró una autoridad notable. Con tres aces y un fuerte derechazo, Cañas se adueñó del partido y del título, y lo festejó eufórico tirado de espaldas en el piso.
Ahora Cañas, quien arrastra una tendinitis en la muñeca derecha, buscará dar otro golpe en el torneo de Cincinnati (el séptimo Masters Series de latemporada) para demostrar que su triunfo no fue casual sino fruto de un enorme trabajo, cuando debute nada menos que ante el mítico Pete Sampras. Pero no sería nada extraño que el argentino desista de jugar.